Velos del Alma

Velos en el Alma
(Por: Birmayan)

El Bien y El Mal

Rompen sus cadenas,
las bestias, las fieras;
acechan sus pupilas rojas,
en las selvas y las arenas;
tras la cerca ovejas,
lobos en las praderas.

Magos y alquimistas,
recorren el llano;
cambiándonos por olvido,
con sus ilusorias conquistas,
un nuevo recuerdo,
de oscuro linaje;
nos mata ese veneno,
de reluciente traje.

Elbien y el mal,
una vez batallaron,
en combate infernal,
sus fuerzas agotaron;
cuando uno murió,
en su inútil soledad,
el otro lo revivió,
por simple necesidad.
Mas nunca se sabrá,
quién de ellos venció;
uno la historia escribió,
el otro en la fe vivirá.


Resuenan lejanos,
los apagados ecos,
de antiguos himnos,
con versos resecos;
otrora sagradas oraciones,
ahora simplescanciones.

De los cansados peregrinos,
lánguidas voces imploran,
por salvadores divinos;
encorvados los adoran,
a estos ídolos de barro,
mientras arrastran su carro.

Pero si los dioses envejecidos,
sus tronos han abandonado;
y los ángeles agraciados,
protector ejército alado,
no pueden alzar el vuelo;
quién queda en el cielo?.

















Cuando se marcharán?

Cómono los vemos?.
Cómo no los escuchamos?.
Si ya los conocemos.
Si ya nos han golpeado.

En la grieta delgada,
de la roca ablandada,
está la semilla enterrada;
retorcida raíz espinada,
en el abismo engendrada,
de la virtud denostada.

Emerge el tallo marchitado,
de flores negras coronado;
sobre el fino tul rasgado,
de nuestro valor pisoteado;
carnívoro capullo importado,
su perfume,el aire viciado.

Sus gajos ha extendido,
ahogando el trigal dorado,
de la simiente despojado,
cáscaras vacías han quedado;
y por puro miedo despiadado,
el triste rastrojo ha incendiado.

Sus lenguas esperan escondidas,
tras largas espinas afiladas ;
para matar las aves heridas,
callando sus cantos de madrugadas;
en notas de llanto reclamadas,
en alegría de risa inspiradas.

Enque momento,
siempre esclavos;
siempre yermos,
corazones de cemento,
siempre estériles,
por los surcos abiertos,
hacen correr la sangre,
siempre sedientos,
en los viejos campos secos,
siempre hambrientos;
y sobre las ruinas abandonadas,
del norte bajan los vientos,
siempre frívolos;
y del sur sube un lamento,
siempre libre,
que no pueden llevarse los vientos.

Noble suelo venerado,qué hijos has parido!!.
Por ellos otro cielo admirado,
por ellos nuestro sol despreciado;
en su altivo mediodía envidiado,
esperan, esperan, siguen esperando,
su inevitable ocaso ansiado,
cuando con el manto ensangrentado,
toque las fronteras de su mundo,
para en hierro dejarlo encadenado,
sin piedad al verlo moribundo;
nos quitarán el mañana esperanzado.

Cómo no los vemos?.
Cómono los escuchamos?.
Si ya los conocemos.
Si ya nos traicionaron.



Letras en Feria


En palabras te diluyes,
en hechos te consumes;
si escribe tu mano,
si golpea tu mano.

En tu semejante dolido,
no te conmueve la miseria,
la ambición te ha perdido,
vendes tus letras en feria.

Escuchas ese sonido?
Es tu voz gastada,
tanto la has usado,
y no has dicho nada.

Alzas tugarganta,
ríe, llora y grita,
sin que te toque nada,
sin que te consuele nada.

Has llegado tan lejos,
tan alto has llegado,
huyendo de los espejos;
lo que están buscando,
tus cansados despojos,
siempre estuvo a tu lado.



















Hiroshima


La calle desolada,
la ciudad abandonada,
rotos los puentes,
evaporadas las gentes.

Cósmico fuego,
caes y subes,te quedas luego,
habitando las nubes.

En un día pintaron,
de negro el cielo,
lluvia ácida dejaron,
para quemar el suelo.

Espectro solamente,
un agujero vacío;
encuentra el doliente,
sus lágrimas en el rocío.

Polvo sagrado,
la tierra que pisas;
tanto ser amado;
devolvednos las risas.

Continúan naciendo,
hijos marcados,
siguen muriendo,
por ellos condenados.

Es tu...