VIgotsky

LA LANZA Y EL ESCUDO
(LA INGENIERÍA DE SISTEMAS DE DEFENSA)

Excelentísimo Señor Presidente de la Academia de Ingeniería;
Excelentísimos e Ilustrísimos Señores;
Señoras y Señores:
Sean mis primeras palabras de agradecimiento, por su presencia, a todas las autoridades, compañeros, amigos y familiares que han tenido la
amabilidad de acompañarme en este día, para mí, tan importante.Señores académicos:
Hay pocas distinciones tan honrosas para un ingeniero como la de haber sido elegido miembro de la Academia de Ingeniería de España, única
de ámbito nacional instituida bajo la monarquía de Juan Carlos I.
Asumo este gran honor con agradecimiento a vuestra benevolencia
por haberme elegido y con satisfacción, y también humildad, por haberme
invitado a pertenecer a una corporacióncuyos miembros han alcanzado,
a lo largo de su vida profesional, una altura científica y técnica que estimo
lejos de mis logros personales.
En el momento de mi elección, en marzo del pasado año, estaba al
frente, como Inspector, del Cuerpo de Ingenieros Politécnicos del Ejército,
antes Cuerpo de Ingenieros de Armamento y Construcción, creado para
perpetuar la tradición de los antiguosingenieros militares y viejos artilleros,
como rezaba el preámbulo de la ley de su creación de 1940. Soy consciente de la gran responsabilidad que he contraído al representarlo en cierto
sentido, y, por extensión, a toda la Ingeniería de Defensa, papel que compartiré con el académico D. Andrés Ripoll Muntaner, a quien agradezco la
amabilidad de haber aceptado contestar a mi discurso de ingreso.Introducción
El discurso, en consecuencia, versará sobre la Ingeniería de Defensa,
presentada esquemáticamente, desde sus orígenes hasta nuestros días, y
teniendo presente que Ingeniería militar –como, con gran erudición, fue
recogido por el Profesor D. Manuel Silva Suárez en su magnífico discurso
de ingreso en esta Academia– fue la única acepción de la palabra Ingeniería durante mucho tiempo.8

RICARDO TORRÓN DURÁN

Así, Sebastián de Covarrubias, en su libro de la Lengua Castellana de
1611, llama ingeniero «al que fabrica máquinas para defenderse del enemigo y ofenderle».Términos parecidos se recogen en el Diccionario Castellano de Terradas de 1786 o en las acepciones de la Real Academia Española, desde su cuarta edición de 1803, en la que se introduce el término
por primeravez, hasta la decimotercera de 1884 en que como acepción
única de Ingeniería aparece «arte que enseña a hacer y usar las máquinas y
trazas de guerra», definición que también recoge el Diccionario EspasaCalpe en su edición de 1922. No sin cierto asombro, hay que esperar
prácticamente a las ediciones de la RAE del siglo XX, para encontrar la definición de ingeniero separada de su exclusivaaplicación a la Defensa.
La aparición de la Ingeniería civil, como es sabido, se realiza fundamentalmente a lo largo de los siglos XIX y XX, en que van surgiendo las distintas ingenierías en sus diversas especialidades: Minas, Caminos, Montes,
Industriales, Agrónomos, Geógrafos, Navales, Telecomunicaciones, Aeronáuticos, ICAI... desgajándose, en ocasiones, de los cuerpos técnicos militares o, aveces, con la participación directa de insignes ingenieros de los
Ejércitos de Tierra, Mar o Aire.
Otro aspecto interesante, interno de los ejércitos, es el de las dos ramas tradicionales de la Ingeniería militar y que han sido representadas, a lo
largo de la Historia, por los Cuerpos de Artillería y de Ingenieros Militares
en el Ejército de Tierra (en la Armada serían el Cuerpo de Artillería deMarina, luego de Armas Navales, y el de Ingenieros de la Marina, luego
de Ingenieros Navales).
Estas dos ramas se constituyen como cuerpos facultativos, claramente
separados, con la llegada de los Borbones en el siglo XVIII. Pero, a lo largo
de la historia precedente, estas dos facetas de la Ingeniería militar, el ataque y la defensa, el armamento y la construcción, el arma y la coraza, la...