vuelve a casa hoy
En muchas ocasiones nos hemos sentido tan mal por haber hechos cosas que no teníamos que hacer, por haber confiado ennuestra propia prudencia, antes que en lo que Dios quería para nosotros. Y es que pasa que en muchas ocasiones nosotros creemos que estamos haciendo lo correcto basados en nuestros propios criterios, sindarnos cuenta que los criterios perfectos de Dios son otros para nuestra vida.
Al leer la ya famosa historia del hijo prodigo, no puedo evitar reconocer que Dios me ama aun más de lo que yo mismocreo que merezco y de formas que me costaría un mundo explicarlas.
Ayer mientras escuchaba una muy buena predicación, reflexionaba sobre esto:
“Volveré a mi casa, y apenas llegue, le diré a mi padreque me he portado muy mal con Dios y con él. Le diré que no merezco ser su hijo, pero que me dé empleo y que me trate como a cualquiera de sus trabajadores”. Entonces regresó a la casa de su padre.Cuando todavía estaba lejos, su padre corrió hacia él lleno de amor, y lo recibió con abrazos y besos”.
Lucas 15: 18-20 (Traducción en lenguaje actual)
No puedo evitar comparar esta lectura de laBiblia con episodios de mi vida o quizá hasta de la tuya, en donde por un momento nos hemos menospreciado por nuestros errores, creyendo que no merecemos ser hijos de Dios.
¿Cuántas veces has fallado y tehas sentido indigno de llamarte su hijo?, personalmente tengo presentes muchos episodios de mi vida en los cuales me he sentido tan mal por mis mismas fallas que he llegado a pensar que Dios no semerece que sea su hijo o que simplemente no me merezco todo lo que El hace por mí.
En ocasiones he querido dejar todo, alejarme de Dios, porque un ser como yo, con tantos errores y defectos no puede...
Regístrate para leer el documento completo.