Bonos
Si la tendencia se mantiene, el financiamiento en el país se encarecerá
El comportamiento de los mercados accionarios en los países emergentes durante las últimas semanas ha estado muy lejos de los desempeños obtenidos durante la bonanza bursátil de los últimos cinco años.
Desde el inicio del año, según el índice MSCI, los cuatro mercadosbursátiles emergentes líderes (Brasil, India, Rusia y China) han caído 9,8% en términos de dólares y los mercados emergentes en general han perdido 7,8%.
La depreciación de algunas monedas latinoamericanas también ha llamado poderosamente la atención. Por ejemplo, el peso mexicano, que hace apenas un mes se cotizaba en su nivel más fuerte en casi dos años, descendió a su nivel más débil desdefinales de noviembre el martes pasado.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos (EE.UU.) y de otros países desarrollados han aumentado y los activos de estos países y el dólar están luciendo ahora más atractivos que las acciones y las divisas de los mercados emergentes, que acarrean un mayor riesgo. Aunque están pagando mayores rendimientos, ya no despiertan el mismo interés. Yeste ha sido un factor determinante de este éxodo de capitales e inversionistas de las plazas del mundo en desarrollo, y de las de América Latina en particular, que se ha visto profundizado en mayo y junio.
Los bonos de Panamá no han logrado escaparse de esa tendencia global. Por solo citar dos casos, el precio del Bono 2053, recientemente colocado, se depreció de 102% a principios de mayo a 83%el pasado 11 de junio; y el Bono 2020 pasó de 119% a 114% en el mismo periodo.
“El Bono 2053 se ha desplomado más del 15% en menos de tres meses. Y el 2020, un favorito de los fondos institucionales dada su liquidez, cayó a su nivel más bajo en el año”, destacó el financista José Abbo al ser consultado sobre el particular.
Y como era de esperarse, así como está sucediendo con los demásemisores soberanos de la región, los mercados ahora han incrementado la prima a pagar por la “probabilidad de default” vía los Credit Default Swaps (CDS) de Panamá.
“Aunque sigue siendo mínima, se ha disparado en cuestión de un mes un 70% y en la medida que esta se siga incrementando hará más oneroso el acceso a capitales internacionales, lo que no pinta bien”, añadió el financista.
De hecho, siPanamá hubiese salido al mercado global bajo las condiciones de mercado actual en lugar del mes de abril, que fue cuando colocó el Bono 2053, el costo adicional de intereses para la República hubiese sido aproximadamente de $3,75 millones por año, que equivale a $150 millones durante la vida del bono global 2053.
Con la salida de capitales en los mercados emergentes, se puede anticipar unadesaceleración del vertiginoso crecimiento que caracterizó a estos países en el período 2009-2012. Y como si esto fuera poco, la caída en el precio de mercaderías y la disminución en la demanda afectarán la entrada de los dólares requeridos para repagar sus deudas externas.
“Tras haber celebrado que sus economías estaban en mejor posición que las desarrolladas y estas eran un modelo a seguir por los paísesde primer mundo, parece ahora que el tiro podría salir por la culata. Y Panamá formó parte de esta euforia y así mismo se está viendo afectada, siendo un país que a raíz del vertiginoso crecimiento económico reciente se empalagó con el crédito para consumo”, alertó Abbo.
Lo que puede venir ahora, si esta tendencia se mantiene, es un incremento en los costos de financiamiento que ejercerápresión sobre las cuentas fiscales, especialmente en los países que dependen del capital extranjero para financiar su crecimiento.
“Caída de bonos afectará el país al subir las tasas de interés, tanto para el gobierno como para los ciudadanos comunes, quienes verán sus letras de préstamos aumentar. Algunos no podrán hacerle frente a los mismos si esto continúa”, anticipa el economista David Saied,...
Regístrate para leer el documento completo.