discurso
Especialistas del InstitutoMexicano de Derechos Humanos y Democracia (IMDHD), el Comité Cerezo y la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos señalan que el caso de los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa refleja la facilidad con la que delincuentes o funcionarios pueden desaparecer a una persona, así como las dificultades y limitaciones que tienen las autoridades para investigar, encontrar alas víctimas y detener a los responsables.
"Sin duda, este caso de los 43 desaparecidos tiene como telón de fondo los miles de desaparecidos que desde el sexenio anterior se vienen trayendo a cuento. La cifra oficial está por arriba de las 22,000 personas desaparecidas, otras cifras hablan de más, pero ya esta cifra oficial resulta escandalosa", dijo Édgar Cortez, integrante del IMDHD.
Elúltimo reporte del gobierno federal sobre el total de desaparecidos en el país —dado a conocer en agosto— indica que hay 22,322 personas en esa situación. El dato se actualiza con base en las nuevas denuncias recibidas por las procuradurías locales o si las autoridades localizan a una persona, viva o muerta.
Sin embargo, los activistas consideran poco clara la información sobre búsquedas,localizaciones e identificación de cuerpos hallados en lugares como fosas clandestinas. Tan sólo en días recientes, por ejemplo, 28 cadáveres fueron encontrados en Guerrero mientras se buscaba a los normalistas. La Procuraduría General de la República (PGR) descartó que se trate de los jóvenes, pero no precisó las identidades, en tanto en el Estado de México se ubicó dos cuerpos en un canal.
Cortez esuno de los 22 activistas y académicos que, para apoyar a los familiares de los normalistas desaparecidos, el 9 de octubre anunciaron la creación de una comisión ciudadana que busca dialogar con el gobierno federal y supervisar las acciones que realice para localizar a los jóvenes.
Al respecto, señaló en entrevista que otra situación que deja en evidencia este caso es cómo los familiares de lasvíctimas desconfían de la labor de las instituciones. Un ejemplo de ello —agregó— radica en que si las autoridades encuentran cadáveres, las familias exigen que los análisis para identificarlos estén cargo de peritos externos.
"Hay una duda de si realmente se van a hacer bien las pruebas, si van a ser correctas, si van a ser rigurosas y si el resultado es confiable o no. Frente a eso, que sedesconfía tanto de las instituciones locales como de las federales, entonces la alternativa se vuelve traer a un grupo de expertos independientes", dijo Cortez.
Los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa desaparecieron la noche del 26 de septiembre tras un incidente con policías de Iguala, en el que los agentes municipales y hombres armados les dispararon y causaron la muertede seis civiles, entre ellos tres de sus compañeros.
A casi tres semanas del hecho, la PGR mantiene su búsqueda y analiza los restos hallados en más fosas clandestinas cavadas en la zona.
¿Un problema minimizado?
"Más que un botón de muestra, es la gota que derrama el vaso", dijo el activista Héctor Cerezo en entrevista por separado.
Para Cerezo, miembro del Comité Cerezo, unaorganización civil especializada en el tema de los desaparecidos, el caso Iguala prueba que cuando hay funcionarios implicados en una desaparición, las autoridades tienden a no referirse al asunto como desaparición forzada, un delito distinto al secuestro y al homicidio que se castiga con entre cinco y 40 años de prisión.
El activista consideró que con esto se minimiza el problema y citó como...
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