El Cole Lo Mejor
¿Se imaginan una sala llena de niños que gritan y hablan al mismo tiempo, una educadora que habla con un micrófono y que a ratos grita (por el mismo micrófono) para quela escuchen, una radio sonando a alto volumen, un trío de educadoras aplaudiendo y riendo entre sí, un niño llorando porque no quiere que su mamá se vaya del jardín, un video de bailes folclóricossonando de fondo y un grupo de niños arrastrando sillas para cambiar de lugar, todo al mismo tiempo?. Pues bien, dejen de imaginar. Esto es una situación real que observé hace pocos días en un jardíninfantil, durante, lo que se suponía era, una actividad didáctica.
En resumen, un caos total y un dolor de cabeza para todas las personas que no están habituadas a esta situación.
Frente a esto surgiópara mi una pregunta inevitable: ¿habrán aprendido algo los niños durante esta actividad?. Es difícil pensar cómo se pueden obtener logros educativos en situaciones donde nadie escucha a nadie o cómose desarrollan aspectos cognitivos y lingüísticos en actividades tan mal mediadas.
En las siguientes líneas trataré la importancia de enseñar a los niños a escuchar, considerando esto como un factorclave en el desarrollo lingüístico. También abordaré el tema de los juegos verbales, que potencian la habilidad lingüística de niños y niñas en etapa preescolar y primer ciclo de educación básica.¿Qué es escuchar?
Lo primero es señalar que escuchar y oír son dos cosas diferentes. "Oír es la percepción pasiva de los sonidos, mientras que escuchar es un acto voluntario que requiere del deseo deusar el oído para enfocar los sonidos seleccionados" (Madaule P.)
Mucho antes de que balbucee el niño ya ha estado expuesto a múltiples instancias en donde ha aprendido a escuchar las estructuras desu lenguaje. De esto se deriva la importancia de comunicarse constantemente con los bebés.
Luego la cadena es predecible: niños que escuchan de manera adecuada, reproducen correctamente (hablar) y...
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