El Curriculum
´LA CIUDAD DE LAS DAMAS´”
Lic. María Gabriela Vasquez
Mendoza, abril de 2004
mariagabrielavasquez@yahoo.com.ar
INTRODUCCIÓN
Lamentablemente son pocas las voces femeninas que nos han llegado desde la Edad
Media. Los varones de entonces, como los de otras épocas también, lo dominaban todo, las
letras, la religión, la política, elpensamiento, y recluían a las mujeres en el ámbito
estrictamente hogareño. Por ello, conocer en la actualidad los anhelos, sueños e
interrogantes de aquellas mujeres nos resulta una tarea bastante ardua, ya que la gran
mayoría de las fuentes con las que contamos están teñidas o contaminadas por los prejuicios
masculinos. Sin embargo, algunas lograron abrirse paso, hicieron audible su voz ytrascendieron con sus escritos. Tal es el caso de Cristina de Pizán (1365-1430), considerada
la primera escritora profesional francesa y una de las más antiguas precursoras del
movimiento de las mujeres de las que se tenga noticia.
A una mujer como esta, que en las postrimerías del Medioevo mantenía a su familia
con las obras que escribía y que se atrevió a cuestionar el canon patriarcal, provoca latentación de colocarla en un pedestal y dejarla allí1. Por ello, es necesario hacer una lectura
atenta y crítica de su vida y obra, en particular de su libro titulado La Ciudad de las Damas,
para poder tener una idea cabal de su pensamiento. El propósito de estas páginas es,
precisamente, empezar a reflexionar sobre lo novedoso y moderno de sus razonamientos
como así también reconocer sucostado más tradicional, propio de la época durante la cual
vivió, para no cometer equivocaciones.
I. LA MUJER
El abuelo materno de Cristina de Pizán fue un conocido anatomista llamado Mondino
de Luzzi y su padre, Tommaso da Pizzano, un astrólogo y médico veneciano. Quizá por estos
antecedentes científicos se pueda explicar su natural predisposición al saber y al estudio.
Cuando era aúnpequeña, dejó su Venecia natal para radicarse con su familia en Francia,
donde creció y vivió el resto de su vida.
1
Christiane Klapisch-Zuber. “Introducción”. En: Georges Duby y Michelle Perrot. Historia de las
Mujeres en Occidente. Madrid, Taurus, 1992. Vol. 2 La Edad Media, p. 12.
Su padre fue el físico de la corte de Carlos V Valois y Cristina fue criada como una
verdadera princesa;además, se acostumbró a estar rodeada de libros y a leer sobre las
cuestiones más diversas. A diferencia de la gran mayoría de varones (y mujeres) que
pensaba que el estudio corrompía a las mujeres, Tommaso da Pizzano estaba convencido de
lo contrario; por ello, le permitió estudiar a su hija. Su madre, en cambio, se oponía a ese
tipo de educación que consideraba “masculina” e impropia de unajoven. La misma Cristina
refiere en un pasaje de su libro La Ciudad de las Damas (1405) aquel momento de su vida:
“Tu padre [le dice una dama a Cristina], gran sabio y filósofo, no pensaba que por
dedicarse a la ciencia fueran a valer menos las mujeres. Al contrario, como bien sabes, le
causó gran alegría tu inclinación hacia el estudio. Fueron los prejuicios femeninos de tu
madre los que teimpidieron durante tu juventud profundizar y extender tus conocimientos,
porque ella sólo quería que te entretuvieras en hilar y otras menudencias que son ocupación
habitual de las mujeres. (...) Y tu madre no pudo arrancar en ti ese gusto por la ciencia, esa
tendencia natural que te ha permitido ir cosechando el saber, aunque fuera recogiendo
migajas. Tu no crees, de esto estoy segura, que tehaya echado a perder tu dedicación al
estudio sino que lo consideras, y con razón, tu más preciado tesoro.” (Libro II, cap. XXXVI,
p. 199 y 200)
De este modo, vemos a su padre como un hombre sin prejuicios misóginos, que la
alentó a estudiar y a su madre, en cambio, como la típica representante de esa gran mayoría
de mujeres medievales colonizadas por las ideas patriarcales imperantes....
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