El problema del más allá en la poesía náhuatl
NÁHUATL
POR
ALICIA N. LAHOURCADE
I.
INTRODUCCIÓN
El azteca es un mundo rígidamente organizado; cada uno sabe, de
acuerdo a su jerarquía o posición social, qué papel le corresponde desempeñar en la comunidad, cómo debe ser su casa, qué ropas o adornos
debe llevar, y sabe, estrictamente, cuál es el campo de sus actividades y
obligaciones.Pero hay algo fundamental: ningún tipo de tarea o actividad se
desarrolla en el plano profano, porque la vida azteca está absolutamente penetrada por la fe religiosa; por eso dice Paul Westhein en su
magistral libro sobre las Ideas fundamentales del Arte Prehispánico en
México:
En el México Antiguo, que basa su concepción del mundo, su ideario
y su pensamiento en el principio del dualismo,falta, sin embargo, el
dualismo entre la vida y la fe. El mito no es un dominio al margen de
la vida, no es Ja satisfacción de necesidades metafísicas, posterior o
simultánea a la satisfacción de las necesidades materiales: abarca la
totalidad de la vida, tanto la religiosa como la profana, que de todos
modos está religiosamente determinada. Cualquier empresa, sea su índole
la que fuere, sólotiene sentido, sólo puede tener éxito si se realiza
en consonancia con la voluntad de los dioses y con su ayuda...
La fe es fe colectiva y obligación colectiva. El que quisiera sustraerse
a esta obligación (cosa increíble), no sólo sería un pecador impío, maldito, condenado a las penas del infierno, sino un elemento asocial, nocivo,
que pondría en peligro la supervivencia de la comunidad. Lareligión
no es superestructura metafísica por encima de una vida profana y civil.
Vida privada, vida que no está al servicio de los dioses, no existe, o,
por lo menos, no cuenta.
Relacionando estas dos características: 1} que el azteca, como todo
pueblo constructor de imperios, tendía a las estructuras rígidas en
todos los órdenes de la vida, y
a) que la actividad, de cualquier tipo que sea,está al servicio de
los dioses, o tiene un sentido religioso, podría deducirse que tenía un
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sistema de creencias claro y conciso, del que el hombre no podría apartarse sin condenarse «a las penas del infierno», aunque los aztecas no
creían en un infierno, considerado como lugar de penas y tormentos;
además, el que osara apartarse de esas creencias estaría básicamente
fuera de lacomunidad; y sería un elemento nocivo para ella.
Esto es lo que lógicamente tendría
cierto es que la poesía náhuatl muestra
vida y la fe, y pone de manifiesto hasta
apartaba de los esquemas establecidos,
mente, una respuesta a sus interrogantes
que haber sucedido, pero lo
una acusada ruptura entre la
qué punto la mente azteca se
y buscaba, a veces dolórosavitales.
Como es lógico, laruptura se da en uno de los puntos más candentes y obsesionantes para el hombre de todas las culturas y de todas las
épocas: la supervivencia después de la muerte. Para poder medir la
magnitud de este distanciamiento entre la fe tradicional y la duda, hay
que proceder por contraste: revisando primero lo que las fuentes dan
como sistema «oficial» (si es lícito usar esta expresión) de creenciasrespecto al más allá y buscando luego en los textos poéticos la incertidumbre y los interrogantes que se plantearon los nahuas.
II. LAS CREENCIAS EN EL «MAS ALLÁ», SEGÚN
LAS FUENTES
Para comprender todo el sistema de creencias nahuas en el «más
allá» conviene destacar, antes que nada, que su concepción difiere fundamentalmente de la cristiana; el nahua vive de acuerdo a estrictos
cánoneséticos, se sacrifica y llega a la inmolación, no para «ganarse»
una eternidad feliz, pues eso está fuera de sus manos, sino para mantener el orden cósmico; para él no tiene sentido la salvación del alma
individual, ni podría lograría, ya que la divinidad, desde que crea el
aliña en el Omeyocan y determina el nacimiento de cada hombre, fija
su destino hasta la muerte, incluso el género de muerte,...
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