Las claves del éxito: Transparencia, rapidez e inmediatez-Dominique Wolton
Las claves del éxito:
Transparencia, rapidez e inmediatez
Dominique Wolton*
Hace más de veinte años que se habla de «la sociedad de la información y
de la comunicación». Las primeras obras de economistas, en su mayoría
americanos, y ciertos trabajos de prospectivistas, aparecieron en los 70. Pero ha
sido después de los 90cuando el tema se ha popularizado, hasta el punto de
convertirse en uno de los argumentos principales del espacio público y de los
media. No transcurre una semana sin que un semanario o un diario pondere los
méritos y las promesas de las autopistas de la información, las virtudes de la
interactividad. y los prodigios de Internet. Es como si, en menos de diez años,
hubiéramos pasado delarcaísmo a las utopías informacionales, luego a los
mercados florecientes, y por último a las mutaciones sociales y culturales que
conmocionan todo a la vez: el trabajo, la educación, el ocio, los servicios. En
resumen: como si todo, o casi, hubiera ya cambiado...
I. Las condiciones técnicas
Los discursos son tan inflacionistas que se olvida la realidad, y se nos hace
creer que todo el mundoestá ya en su casa delante de esa famosa «pared de
imágenes», el no va más de la modernidad tecnológica, que le permite hacer
zapping por lo menos en unas sesenta a cien cadenas1. Sin embargo, en cada país
una aplastante mayoría de espectadores contemplan entre cinco y siete cadenas, y
la audiencia se concentra en tres o cuatro de ellas. Pero qué importa la realidad,
puesto que, si todo no hacambiado todavía, todo va a cambiar... La misma
distancia con Internet. Se habla tanto cada día, que se olvida que sólo hay entre
treinta y cuarenta millones de ordenadores en el mundo que están conectados a la
red, de los que veinticuatro millones están en Estados Unidos, mientras que a
*
En: Wolton, Dominique. “Sobre la comunicación. Una reflexión sobre sus luces y sombras”. Madrid:Acento Editorial, 1999. Quinta parte: Cap. 13.
1
Recordemos que en Francia hay veintitrés millones de receptores de televisión e, incluso, si el
equipamiento en parabólicas es rápido, hay actualmente menos de dos millones, y otros tantos
hogares cableados. Está lejos, pues, todavía la realidad de los fantasmas de la sociedad interactiva.
Suponiendo evidentemente que se trate de un idealesperable....
1
www.cholonautas.edu.pe / Biblioteca Virtual de Ciencias Sociales
juzgar por la cobertura de prensa se puede creer que los mil millones de personas
de los países ricos son ya sus usuarios. A escala de Francia, ya nadie pregona el
éxito excepcional de seis millones de Minitel y de sus catorce millones de usuarios,
lo que es un éxito, por esta vez, mundial. Para qué hablar delos 120.000 a 200.000
usuarios de Internet, presentados como la «sal de Francia» y la vanguardia de la
sociedad de mañana... ¿Quién no ha leído el reportaje ni visto la emisión de
televisión sobre los «cibercafés», esos espacios «del futuro» donde cada uno, en
una atmósfera convivencial, dialoga con el otro extremo del mundo? Hay una
desproporción considerable entre esos cuantos cafés y elnúmero de emisiones que
les han sido dedicadas, lo que podría hacer creer que los «viejos» cafés han
desaparecido, porque se habla menos de ellos... Sin embargo, se puede ser un
perfecto internauta, pero incapaz de hablar a otro. Esquizofrénico, pero enganchado
a Internet. En resumen, si el fenómeno es aún ampliamente minoritario en la
realidad, es ampliamente mayoritario en los media, lasconversaciones, las
referencias. Todo el mundo tiene miedo de no estar «en la onda» y «se apunta». Si
no existiera la cruel verdad de los hechos, se podría creer que todos los franceses
«inteligentes», y también los ingleses, los alemanes, en fin, todos los que viven «en
su época» y se preocupan del futuro, están conectados a la Red...
De hecho, es sobre todo la significación cultural la que...
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