Realidad Contrastativa
El realidad pluricultural y multilingüe andino se remonta a la presencia de los grupos que fueron poblando este espacio, en un proceso que se inició hacia 20,000 a.c. (Rostworowski, 1988)
El área andina fue siempre un espacio plurilingüe en el cual predominó una lengua —o familia de lenguas—: el Quechua, disputando la supremacía con las lenguas de las familias delAru y Puquina, en el sur, y con las del Sec o Tallán, el Muchic y el Culli, en el norte (Cerrón-Palomino, 1982b; Godenzzí, 1987); además de otras familias lingüísticas no registradas todavía
El poder colonial, en su afán por imponer un régimen autocrático, no se molesta en mantener esa situación lingüística, al parecer, más o menos equilibrada del Tawantinsuyo y ya “...en 1550 Carlos I dispusola castellanización de los nativos americanos” (Torero, 1974: 184) y, en tanto se implementaba esta política, “El Quechua, por ser la lengua más extendida del imperio y ser la que usaban los poderosos del Cuzco, fue aprovechado por la iglesia y el Estado para los fines de la conquista espiritual y económica” (Godenzzi, 1987a: 15), obligando a los funcionarios administrativos y curasdoctrineros a aprenderla, creando en 1579 la “Cátedra de la Lengua General de los Indios”, que funcionó hasta 1784, cuando es clausurada, “...subsecuentemente a la Revolución de Túpac Amaru en 1780” (Meneses, 1982: 243), porque “...la administración colonial arremete contra todo lo que podría ser considerado como parte de la cultura andina: prohíben el teatro y la pintura indígena, la lectura de “LosComentarios Reales”, el uso del Quechua, la vestimenta tradicional” (Flores Galindo, 1988: 265). Así, el castellano va imponiéndose paulatinamente en los ámbitos antes ocupados por las lenguas nativas, desapareciendo unas y retrayéndose las otras (1).
El advenimiento de la República no modifica esta dinámica: el Castellano las desplaza totalmente de la costa y arrincona a las lenguas, porentonces y ahora, más extendidas, casi exclusivamente hacia la sierra sur. El objetivo final, pocas veces declarado, es la desaparición total de ellas. Correlativamente, el menosprecio por las culturas andinas se acentúa, vía por ejemplo, la escuela, porque se las considera como factores del retraso económico, social y cultural del país. Esta actitud es general, hasta entre los defensores de laraza humillada porque “...aún en muchos de quienes andaban preocupados por la situación del indígena, de su educación y su progreso social, la cuestión central giraba en torno al aprendizaje del castellano y de la civilización del indígena” (López, 1988b: 279), en consonancia con los grupos que detentan el poder económico y social que propugnan una política lingüística asimilacionista(Cerrón-Palomino, López, ibidem; Pozzi-Escot, 1989; Godenzzi, 1987) como única solución a la multiplicidad étnico-lingüística. En esta estrategia, la escuela juega un papel muy importante (López, 1988b).
Actualmente, las dos lenguas mayores habladas en la sierra sur andina, continúan sujetas a un proceso cuya solución de continuidad parece ser su pronta desaparición (Albó, citado por Cerrón-Palomino1987b: 39) si no se implementan políticas dirigidas a restituir su estatuto social, apoyar su desarrollo lingüístico, vía su estandarizaciónde la escritura y su manejo en los espacios educativos (Albó, 1974, 1977; Cerrón-Palomino, 1983, 1987a; Godenzzi, 1987; Jung, López et al, 1984; Pozzi-Escot, 1988b, Vries, 1988; etc.).
Esta apretada síntesis histórico lingüística no estará completa si nomencionamos a las casi 57 lenguas, usadas por aproximadamente doscientos etnias amazónicas y que se agrupan por lo menos en once familias lingüísticas. Entre las que tenemos al Aguaruna, Campa, Ashaninka, Shipibo-Conibo, Machiguenga, Cocama, por citar a las más extendidas demográficamente. Pese a su tardío contacto con la cultura occidental, el proceso de extinción de estos idiomas ha sido...
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