Transicion Politica De Nicaragua Jefry Manuel Munguia Gamboa
En la literatura teórica sobre los procesos de transición a la democracia, se han identificado cuatro tipos, a saber: los desplazamientos, las transformaciones, los traspasos y las intervenciones.
Desde una perspectiva tanto teórica como histórica, ¿a cuál o a cuáles tipos de transición a la democracia representativa pertenece el caso de Nicaragua entre los años 1979 y 1990? ¿Cuáles son losfactores de consolidación de la democracia que han estado presentes a partir de inicios de la última década del siglo XX y cómo han evolucionado? ¿En cuáles de ellos se evidencian progresos, estancamientos o cursos regresivos?
Una peculiaridad de la transición a la democracia en Nicaragua consiste entonces en que se compone de dos procesos diferentes. Ellos remiten, conceptualmente, a dos tiposdistintos, particularidad que ha sido pasada por alto en la literatura que ha analizado las transiciones hacia este régimen político en la región centroamericana (y en otros casos de otras partes también, como en algunos de África). En concreto, éstos son: el desplazamiento (la expulsión de Somoza en 1979) y el segundo es del tipo traspaso, concretado como acuerdo interelitario entre la cúpulasandinista y el gobierno de Violeta Barrios viuda de Chamorro, tras la derrota electoral de los primeros en febrero de 1990.
El primero de ellos, como ha sido lo usual en los desplazamientos como un tipo de transición, se compuso de tres fases diferenciadas:
La primera consistió en la lucha contra Somoza como cabeza del régimen político no democrático de tipo tradicional en su variantepatrimonialista de sultanato, en cuyo interior no había elementos democratizadores o reformistas decisivamente influyentes. Esa fase se caracteriza porque, hacia el final de los años setenta del siglo XX, se fue conformando dificultosamente una amplia coalición de fuerzas sociales y políticas antisomocistas cuyo liderazgo efectivo fue ganando el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), el único actordesde siempre persuadido de que a Somoza sólo se le expulsaría del poder mediante las armas.
La segunda fase comprendió la intensificación de la guerra, la huida de Somoza y el desplome de la Guardia Nacional tras las pretensiones de Urcuyo Maliaños de perdurar en el poder, todo lo cual condujo a una derrota sin concesiones en julio de 1979. Se trató de un resultado mucho más favorable al FSLN delo que esta misma organización consideraba factible lograr y el último en el que pensaba Estados Unidos al pretender, por diversos medios diplomáticos, limitar los alcances de la entonces inevitable e inminente victoria sandinista.
La tercera fase radicó en la pugna que tras el triunfo se desarrolló en el seno de la coalición antisomocista por la hegemonía dentro de ella. Derivó hacia lapreeminencia política del FSLN y hacia el intento, muy limitado, de avanzar en su proyecto histórico, caracterizado en sus metas últimas por una sociedad socialista inspirada por el modelo de Cuba, pero teniéndose que privilegiar, en virtud de las circunstancias históricas, el proyecto táctico (economía mixta, pluralismo político y no-alineamiento). A su vez, la oposición política interna, de variadosigno ideológico, no logró detener la supremacía sandinista, hasta que una parte de ella, más bien muy tempranamente y en esto azuzada por el gobierno de Estados Unidos, renunció al intento de la competencia política dentro de Nicaragua y constituyó la Contra en su diversidad, con amplio respaldo norteamericano de la administración Reagan (1981-1989), el desarrollo de una guerra de baja intensidadpor parte de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y el desgaste del gobierno sandinista en lo económico y en lo político. Los sandinistas ganaron genuinamente las elecciones de 1984, con lo que validaron su legitimidad por la vía del método electoral, pero en el contexto de la agresión de la Contra fueron reduciendo el espacio político de disensión interna, tanto formal como informalmente, y...
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