VIEJAS DEUDAS EUROPEAS

VIEJAS DEUDAS EUROPEAS

En 1887, al sur de Pretoria, se encontró un fabuloso filón de oro, tal vez el más grande del
mundo, el lugar se llamaba Witwatersrand. Paul Kruger, entonces Presidente de Transvaal,
parte de la actual Sudáfrica, donde este yacimiento se encuentra hasta nuestros días, afirmó
con oscura clarividencia que en lugar de alegrarse deberían llorar, pues ese oro causaría un
bañode sangre en su país.
Kruger no se equivocaba, esa veta generó una avalancha de colonos y cazafortunas ingleses
que al convertirse en mayoría amenazaban el orden establecido, de hecho, al verse limitados
por las medidas que el gobierno tomaba para controlarlos, hubieron en respuesta intentonas
golpistas y finalmente la situación se decantó hacia la guerra, la Segunda Guerra Anglo-Boer
para ser másprecisos (1889-1902), que acabó con la caída del gobierno y posterior exilio de
Kruger.
Este episodio relativamente local de la historia africana del siglo 19 podría extrapolarse a toda
ella y sus últimos cuatro siglos de dominio europeo, en los que sus riquezas naturales y los
apetitos que esos recursos despertaron en la potencias europeas de la época, han sido su
tragedia. Tragedia cuyoepisodio más reciente es el actual éxodo hacia Europa, a través del
Mediterráneo, ahora convertido en una gran tumba que sigue acumulando inquilinos. Éxodo
que además amenaza ahora con cruzar también el Canal de la Mancha.
Esta tragedia tiene muchas raíces, una de ellas es que África, a diferencia de América o la India,
que también fueron parte de grandes imperios coloniales, fue principalmentecolonizada con
la finalidad de explotar y extraer recursos, no para instalarse en ella y poblarla de manera
permanente, creando con ello instituciones e institucionalidad, con excepciones como la ya
mencionada Transvaal, parte de la actual Sudáfrica, país que por cierto es un lunar de relativo
desarrollo y estabilidad en un continente por momentos (y territorios) peligroso, caótico e
inestable.Revisando un poco la historia veremos que la influencia europea se deja ya sentir desde finales
del siglo 15, con las primeras colonias portuguesas, dedicadas a la extracción de oro y marfil y
además, con el descubrimiento de América, rápidamente también a la exportación masiva de
seres humanos como esclavos. Ante lo lucrativo del negocio, pronto se sumaron al festín
ingleses, holandeses, españoles,daneses, alemanes e italianos entre otros.
En el camino para afianzar la hegemonía europea se recurrió a cualquier método, fomentando
rivalidades y odios tribales, que si bien ya existían, se supieron azuzar y manipular según fuese
útil y necesario durante toda la etapa de colonización y después de ésta, ya en el siglo 20,
dejando en el poder a grupos o bandos afines para asegurar el acceso ypreferente explotación
de recursos aun valiosos. Otros métodos incluyeron los campos de concentración, que no
fueron una novedad nazi, de hecho se emplearon en la Segunda Guerra Anglo-Boer. Se
recurrió incluso al genocidio, en algunos casos documentados y reconocidos por la ONU
(exterminio de los pueblos Herero y Namaqua entre 1904 y 1907).

Luego, durante la Revolución Industrial la urgencia dematerias primas y, principalmente, de
mercados (cautivos en este caso), hizo que la explotación y extracción se intensificara,
exportando luego a esas mismas regiones paupérrimamente desarrolladas productos con alto
valor agregado, prácticamente imponiendo su consumo, generando un círculo vicioso de
dependencia y subdesarrollo que ha subsistido hasta nuestros días.
Ya en el siglo 19, ante la voracidadde las naciones europeas que querían una mayor
participación del botín africano, éstas se sentaron a una mesa en la Conferencia de Berlín
(1884-85) para repartirse no solo los recursos sino especialmente los mercados ahí existentes,
donde podrían colocar toda su producción excedente, reactivando así sus economías muy
venidas a menos en algunos casos. Este intento de ponerse de acuerdo fracasó...