11 Primavera Con Una Esquina Rota

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Estudios Especiales
Notas sobre la historia económica argentina:

De Pavón al hundimiento
de la Convertibilidad
XI- El retorno del peronismo y los cambios de contexto
Un militante del secreto
“En los años setenta, el empresario José Ber Gelbard,
afiliado secreto al Partido Comunista Argentino, fue ministro
de Economía de Juan Domingo Perón. En rigor se trató de
una decisión del líderjusticialista y no de una negociación. Lo
real es que Gelbard jamás reconoció en vida su verdadera
identidad. No hubiera podido, en el marco de la guerra fría y
el feroz anticomunismo del establishment militar y económico.
Perón sabía al menos que Gelbard tenía fuertes nexos con
la Unión Soviética, y eso representaba una garantía para sus
planes de reindustrialización del país. Lo demás, si conoció
o nodónde estaba el corazón político de su ministro, sigue
siendo fuente de controversias”.
(...)
“No todo fue lineal. El mismo Perón aprobó los créditos
para que Cuba comprara automóviles, en un virtual acto de
ruptura con el bloqueo norteamericano a la isla, y envió al
ministro de Economía, Gelbard, a la Unión Soviética, donde
se firmaron acuerdos que hubieran permitido un proceso de
industrializacióndiferente del país y de su infraestructura
hidroeléctrica, eléctrica y ferroviaria.
“El 12 de junio de 1974 Perón, en su última aparición pública,
hizo una inesperada convocatoria que alentó a la izquierda y a
las organizaciones peronistas enfrentadas con él, a que había
una reacción positiva. En rigor, el Presidente veía desgranarse
una de sus herramientas de poder, el pacto social, ese acuerdoentre la CGE y la CGT que permitió, por unos meses, controlar
la inflación e incrementar el PIB. Días después, la enfermedad
terminaría con su vida. Fue el 1ro de julio de 1974, cuando
Isabelita asumió la Presidencia de la Nación”.
(Isidoro Gilbert; La FEDE. Alistándose para la revolución; ed.
Sudamericana; Buenos Aires; 2009)
“El eje de la relación con los soviéticos era Gelbard, a quien en
losmemorándum internos le decían ‘el Ruso’, le confió al autor
uno de los sobrevivientes de la dirección montonera. Para el
autor se trató de una hipótesis dudosa. Es cierto que el ministro
de Economía mantuvo algunas reuniones con la dirección
montonera, para recabar respaldo a su política económica,
incluida su audaz apertura al Este. Y para equilibrar el nefasto
papel que -decía- jugaba José LópezRega.
“Gelbard pensó en más de una ocasión que ‘el Brujo’ planeaba
asesinarlo. Los Montoneros dejaron resumidos en memorandos

sus encuentros con ‘el Ruso’, sus acuerdos y las diferencias
que tuvieron. Un gesto de respaldo a esa gestión fue el haber
designado como enviado especial a Moscú a Miguel Bonasso,
director del matutino Noticias, cuando Gelbard realizó su viaje
a la URSS y otros países delEste.
El matutino era la voz indiscutible de la conducción política
de Montoneros. Bonasso escribió entusiastas artículos sobre
la gestión de Gelbard ante los lideres soviéticos y transmitió
más tarde a la cúpula miliciana la importancia estratégica de
algunos de los acuerdos firmados en Moscú.
(Isidoro Gilbert; El oro de Moscú; ed. Sudamericana; Buenos
Aires;1994)

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Lo ocurrido en elperíodo comprendido desde la vuelta de
Perón a la Argentina -el 17 de noviembre de 1972- luego de un
exilio que duró 18 años, hasta la hecatombe de la Presidencia
de Isabel Martínez, con la instalación de la dictadura militar en
marzo de 1976, constituyó el prólogo de una de las mayores
tragedias nacionales. Su epílogo estuvo constituido por el
desastre de Malvinas.
Analizado en perspectiva, existenrazones sólidas para
presumir que el fracaso de aquel ensayo fue, en gran medida,
consecuencia de ciertas fallas en la concepción estratégica
original. Al no ser corregidas, llevaron al caos. Durante todos
esos años abundaron los malentendidos, ya desde los meses
previos a la breve gestión del Dr. Héctor Cámpora. Esa
situación puede asimilarse a la de un conjunto de actores
sociales embarcados en...