Abderrahm N I

Abderrahmán I (Damasco 731-Córdoba 788). El príncipe errante.
A mediados del s.VIII la dinastía Omeya de Damasco gobernaba el imperio musulmán. Los abásidas los derrocaron y masacraron a toda lafamilia pero un solo superviviente fue capaz de recuperar el perdido esplendor en la lejana provincia de Al-Andalus: Abd al-Rahman.
Recibió una refinada educación y con 20 años abandonó Damasco vagandodurante años por Palestina y Mauritania. Conociendo los problemas por los que pasaba Al-Andalus desembarcó en Almuñecar y bereberes, sirios y yemeníes de la península le ayudan en su proclamación comoemir frente al emir oficial Yusuf al-Fehr. Después de varios meses de combates, Abderrahmán entra en Córdoba en 756 aclamado por la población proclamando Al-Andalus como emirato independiente.Implantó una justa política de reparto de tierras, sofocó con eficiencia los intentos de sublevación y potenció la idea de un Estado central. El éxito del emirato estaba basado en:
Ejército bien organizado.Creación de una estructura administrativa sin precedentes en Europa, dividiendo Al-Andalus en 7 provincias cada una al mando de un valí.
Durante 32 años fue el hombre más importante de la PenínsulaIbérica; guerreó contra Carlomagno, ganó la Marca de Zaragoza y todos los incipientes reinos cristianos de la península rendían tributo y vasallaje a la gran Al-Andalus.
Embelleció ciudades, fomentóambientes culturales y sobre todo, mandó construir la mezquita de Córdoba.
La legislación giraba en torno al Corán aunque se toleraba a los cristianos -mozárabes- previo pago especial de impuestos; de estaforma convivieron las 3 religiones impulsando el crecimiento económico, social y cultural.
Su hijo Hisham I heredó su legado y durante casi 300 años los Omeya dieron luz al occidente europeo. Primerocomo emirato y más tarde como califato, Al-Andalus inscribió su nombre en la leyenda de las grandes culturas, y todo empezó con un príncipe errante que quería cumplir su sueño.





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