Adolescentes

loPONTIFICIA UNIVERSIDAD CATOLICA DEL ECUADOR
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
PSICOTERAPIA INFANTIL Y DEL ADOLESCENTE
Andrés Parra
Octavo Clínica
“Las drogas y la adolescencia”
“Im Anfang war der genuss(en el principio era el goce)”
La casuística en la clínica con adolescentes, nos lleva a determinados puntos que se repiten en forma de demanda, extraña al mismo adolescente, que generalmente desdeuna institución, o desde la familia, y que nos remiten a: problemas con la autoridad, conductas antisociales, rendimiento académico, asuntos sexuales, etc. Las conductas antisociales representan en los imaginarios sociales un continuo de dudas y reproches sobre la “educación” de su hijo, buscando respuestas ahí donde las conductas parecen venir como de otro lado, como algo que se escapa, como undemonio que se introduce en el hijo adolescente y lo transfigura, lo muta en otra persona y le “obliga a cometer los perores actos, lo pervierte, ese demonio a obtenido un nombre, en la mayoría de los casos designado como un solo objeto univoco y maldito: La droga. Los problemas que el consumo de sustancias consideradas estupefacientes y psicotrópicas se encuentran entre los principales problemasasociados a la juventud descarriada, buscando en su existencia la explicación de eso que justamente no tiene respuesta, escapa.
La adolescencia no siempre existió. Antes de su aparición y circulación como significante se era niño, y en una abrir y cerrar de ojos, ayudados o asistidos por un ritual se re-aparecía como adulto miembro del lugar social. Martine Lerude puntualiza que: “Se puede hacernotar, que la adolescencia es una invención del siglo XX. Una invención que da testimonio en primer lugar de la organización de una sociedad y del lugar que esa sociedad del da a la juventud.” En el periodo de post guerra, un ritmo marco una brecha generacional, la música había aparecido como un objeto destinado a una población que ansiaba adquirir cosas, objetos que faciliten la vida, los jóvenespodían comprar, solo había que ofrecer algo que aparezca como ideal y como representante de un nuevo estilo de vida que estaba naciendo. Así se marcaba el inicio del aparecimiento de una nueva generación, no de niños, no de viejos. Eran los jóvenes, que tenían su propia ropa, su propia música, sus propias ideas, sus propios lenguajes. Después vino la “revolución Hippie” , los jóvenes serevelaban contra las ideas establecidas ,contra el régimen de poder y rechazaban la eventualidad de una guerra con consignas de amor desenfrenado. Enseguida se busco un culpable de aquellas desviaciones de la norma, y se lo encontró en aquellas sustancias que eran objeto de uso y abuso por parte de estos jóvenes. Se marcan nuevos significantes para dar cuenta de las nuevas relaciones entre términos; así“drogadicto”, “drogadicción” y alrededor de estos se tejen redes marcadas por estereotipos y razonamientos lineales y causales.
Así se ubica a las drogas como causantes de toda serie de males sociales, a la vez que se buscan y escudriñan las causas que llevan a alguien (normal) a la adicción (anormal). Sobre este último punto son innumerables las publicaciones y aportes que se han hecho; bajaautoestima, falta de confianza, presión social, vulnerabilidad. Planteamientos que provienen en su mayoría de la discursiva del aparato de poder y ubican a la “droga” como algo univoco, con un valor per se, y con una fenomenología que se repite, anulando cualquier intento de particularización.
Las acciones conllevan un acto de decisión de elección. La convivencia, que en última instancia depende derenuncias y de lazos sociales, discursivos que implícitamente llevan consigo una carga de sufrimiento, de malestar, del cual constantemente tratamos de huir, por distintos medios… “Pero los más interesantes preventivos del sufrimiento son los que tratan de influir sobre nuestro propio organismo, pues en última instancia todo sufrimiento no es más que una sensación; solo existe en tanto lo...