Amalia. EJEMPLO ARGUMENTO DE CINE

Argumento Amalia
Se escuchan los gemidos de placer de una mujer. En una modesta y pequeña habitación de pensión, Amalia, de 60 años, morena, de cuerpo voluptuoso aunque el peso de los años comienza a hacer estragos en su carne, se balancea rítmicamente sobre Enrique, de 45, flaco, desgarbado. Enrique le pide que le de culo, pero Amalia lo rechaza con delicadeza y excitación. Ambos están a puntode llegar al orgasmo, aunque Enrique se adelanta. Amalia cae sobre él, satisfecha. Ambos contemplan el techo con una sonrisa de cansancio y placer.
En la misma habitación, Enrique coloca varios billetes en una mesita de noche mientras Amalia termina de vestirse. Ella le cuenta burlona que hubo un aumento por la inflación. Además, hoy es su aniversario. Enrique refunfuñe, pero igual colocaotros billetes sobre la mesa. Amalia le entrega un pequeño regalo. Enrique no entiende porqué se lo entrega. Amalia se ofende aunque lo oculta. Enrique lo nota y le pide que vayan al bar por una cerveza. Amalia va a besarlo en la boca, pero en el último instante retira sus labios y termina por besarlo en la mejilla.
En el viejo bar el Guasare, cerca del puerto de Maracaibo, las mesas están ocupadaspor hombres solitarios o acompañados de prostitutas, todas mayores de 50 años. Jolie, la encargada y mejor amiga de Amalia, reparte varias cervezas. De la rocola, suena Me Muero por Besar tu Boca de Claudia de Colombia. Amalia canta emocionada en medio de todos. Enrique la mira desde su mesa, sonriente. Cuando termina la canción, los pocos clientes la aplauden y lanzan varios piropos. Amaliaregresa a la mesa. Un Mendigo, de 30 años, se acerca pidiendo dinero. Ella lo despacha con desprecio. La mujer conversa con Enrique, quien está fastidiado porque debe irse con su esposa. Amalia le pide que se quede un poco más, pero Enrique no puede, lo están esperando. Amalia lo despide cariñosa, le pregunta si volverá en dos días. El afirma que sí, como siempre, llueve, truene o relampaguee.
Enuna pensión donde Amalia convive con el resto de prostitutas del bar, todas cocinan y chismean en comunidad. Amalia canta un bolero cuando es interrumpida por Soraya, de 60 años, quien la increpa por andar enamorada de Enrique. Amalia lo niega, además tiene una prueba, nunca le ha dado el culo y la regla es que solo se le da el culo a quien se ama. Soraya no le cree. De lejos, Jolie observa con algode celos.
En el patio de la pensión, Amalia, Jolie y el resto comen juntas mientras conversan. Jolie se queja, han bajado mucho las ventas en el bar. Soraya se jacta que ella tiene muchos clientes, pero como son viejos ya ni tener sexo pueden. Jolie insiste que deben hacer algo. Amalia mira preocupada y en silencio.
En su habitación, Amalia practica su ritual de belleza. Al terminar, cuenta losbilletes que hizo en el día. Se decepciona, son muy pocos. En ese momento, tocan a la puerta. Es Jairo, el encargado de la pensión, viene por el dinero del alquiler diario de la habitación. Amalia se lo entrega. Cuando va a acostarse, encuentra una pulsera barata debajo de su cama. Ella sonríe con inocencia. Le escribe a Enrique para agradecerle el detalle.
Es temprano en la mañana, Amalia aúnestá dormida cuando de repente un fuerte estruendo de ollas y gritos la despiertan sobresaltada. Es Jolie, quién pasa por las habitaciones gritando para que se despierten, el que no madruga no mama. Amalia aún soñolienta, abre la puerta. Jolie entra con una rosa para la colección. Amalia la recibe con cariño y coquetería inocente. Le pregunta si no le va a tapar las canas.
En el patio de la pensión,Jolie coloca tinte en el cabello de Amalia mientras el resto de mujeres comen o hacen sus rituales de belleza. Jolie nota el regalo de Enrique. Soraya interrumpe, no puede negar su amor con Enrique. Amalia insiste que deje la bobería, ella no está enamorada nada, solo que Enrique es su mejor cliente.
La calurosa mañana avanza, Amalia camina coqueta por una plaza del centro de la ciudad llena...