Arqueologia de la mente

SEMINARIO 4. LA PINTURA POMPEYANA.

La pintura romana se asienta sobre dos grandes bases: por un lado, la de la herencia griega; por otro, la del sentido esencialmente práctico del carácter romano, que se manifiesta en toda su producción artística. También se inicia en íntima conexión con el Arte Etrusco del que tuvo como precedentes los frescos de las cámaras funerarias y con el de lascolonias griegas de la Magna Grecia,, incorporando, además, múltiples elementos de las más diversas culturas mediterráneas bajo dominio romano, con un sincretismo sumamente característico.
La herencia griega, como en toda la cultura de la República y del Imperio, es el punto de partida esencial. Durante los tiempos de la primitiva Monarquía (siglo VI a.C.) Roma había ostentado un carácter rústico ysimple; todo su esfuerzo se había centrado en afianzarse en Italia y en el Mediterráneo y en su expansión por el mundo circundante; en este período, los romanos tendían a considerar el arte como una actividad corruptora de las costumbres e impropia de un buen ciudadano. A partir del siglo II a.C., este panorama cambiará por completo: se transforman las costumbres y la sociedad, surge el amor al lujo,afluyen a Roma las riquezas de los países conquistados y las influencias de otras civilizaciones se dejan sentir con fuerza. Subyugada por la belleza de las ciudades griegas, Roma comienza a hacerse suntuosa, pavimentando sus calles, ubicando estatuas griegas para ornato de la Urbe e introduciendo, asimismo, el gusto por la pintura.
Desde los tiempos de César, pues, la admiración hacia la pinturagriega va a ser constante, y admiración característica de las clases intelectuales y refinadas. Los pintores helenos del pasado (como Zeuxis, Parrasios, Apeles, Filoxenos de Eretria, Arístides de Tebas) serán modelos constantemente ensalzados y sus técnicas, estilos y temas, continuamente repetidos.
Ya cuando Mummio toma Corinto, en el 146 a.C., comienza un enorme acarreo de pinturas griegas aRoma. Se duplica este traslado en tiempos de Pompeyo y, bajo César, fueron multitud los pintores helenos que se establecen en la propia Roma para cumplimentar los numerosos encargos de los patricios.
En la época de Augusto, incluso, se conformaron auténticas pinacotecas con obras griegas de los siglos IV y III a.C. sobresaliendo, entre todas ellas, la del Pórtico de Octavia, que llegó a albergaruna fantástica colección de cuadros sobre madera de artistas helenos.
Por todo esto, es lógico que el sustrato pictórico romano se asiente en la herencia griega y resulta fácil comprender que, sin ella, sería imposible abordar su estudio y valorarlo debidamente. Esto ha de unirse a el sentido práctico que el romano siempre mostró en su producción artística. Sentido práctico que le hará buscar nosólo una estética bella, sino también una finalidad concreta y útil. En el caso de la pintura, esta finalidad será la de la decoración, la de prestar, por medio de los colores, alegría y animación a los interiores, la de, incluso y como más adelante veremos, buscar efectos suntuosos por medio del fresco e intentar agrandar aposentos a base de efectos pictóricos en sus murales... Una pintura bella,sin duda, pero también una pintura que más que «la belleza por la belleza» ostentará el principio de «la utilidad bella»... Una pintura «auxiliar» que más que atraer al espectador por sus valores plenamente artísticos lo haga por su efectismo, por su carácter ambientador, grato o, simplemente, por la docencia que encierra el tema o asunto que relata.
Los muralistas y los fresquistas fueronconsiderados como «artesanos» (en general, no como «artistas») con repertorios de temas que repetían constantemente y con modelos tomados del mundo griego clásico y helenístico que, por encargo de los patricios, reproducían sin cesar. De ahí que, aunque son muchas las pinturas romanas llegadas a nosotros, son pocos los nombres de pintores que conocemos, y aun menos son los datos de que disponemos...