Arte y teoría feminista

CAPÍTULO 10. ARTE Y TEORÍA FEMINISTA


El feminismo ha sido sin duda uno de los espacios de pensamiento y acción que más han contribuido y contribuyen a la transformación de la sociedad y que mayor influencia han tenido en el campo del arte. Al arte feminista se le debe, no solo el creciente protagonismo de las mujeres artistas dentro de la historia del arte, sino aportaciones clave endiversos campos del arte contemporáneo siendo quizás su mayor aporte sus discursos críticos acerca de la representación.

A través de la problematizacíón de la representación han puesto en cuestion el carácter natural y universal no solo de la condición femenina sino de la sociedad en general, han evidenciado que nuestros cuerpos e identidades están socialmente construidos y que las imágenes que lorepresentan lejos de ser “inocentes” responden a un modelo cultural e ideológico.

El arte feminista se ha venido desarrollando con fuerza desde la década de los sesenta con artistas que sólo a principio del nuevo milenio han sido finalmente reconocidas por las grandes instituciones del arte. Es en esta época en donde el mensaje parecía necesitar ser más explícito y comunicado con accionesinquietantes y radicales: “salían tantas cosas que nunca habían expresado las mujeres que todo era muy crudo, todos eran temas nuevos y era muy emocionante poder expresarlos” dice la escritora Lucy Lippard. Durante los primeros feminismos radicales en la norteamérica de los sesenta y setenta se organizaron campañas espectaculares como las performances de Susan Lacy para los medios [In Mourning and inRage , 1977 o la ofensiva del Ad Hoc Women Artists Committee contra el Whitney Museum que consiguió que el museo multiplicara por cuatro la participación de las mujeres (pitadas y sentadas constantes dejando huevos y támpax por las esquinas entre otras acciones). Otras tácticas de guerrilla son las del accionismo Valie Sport o ya en los ochenta las Guerrilla Girls, también preocupadas con laescasa presencia de las mujeres en los espacios de poder del mundo del arte.

Otra estrategia creativa se sitúa en el lado opuesto (el de la micropolítica). Artistas como Martha Rossler o Rosemary Trockel en los setenta/ochenta o Bobby Baker en la actualidad trabajarán con la relectura de espacios tradicionalmente considerados como femeninos y normalmente excluidos en el arte tradicional, usandoademás, en muchas ocasiones, las llamadas artes menores (“artes femeninas”) como el bordado, telas, papel recortado, el pachtwork o la cocina.

Muchas de las artistas encontraron en el body art y la performance, muchas veces registrada/reciclada en videoarte, el espacio de acción más adecuado a sus necesidades de expresión. En los setenta artisas como Carloe Scheenman, Ana Mendieta, Gina Pane,Marina Abramovich o Hanna Wilke hicieron un uso provocativo de su propio cuerpo y reinvidicaron valientemente su derecho a representarse a ellas mismas y no limitarse únicamente a ser objeto de la mirada masculina. Desde los 80 nuevas generaciones de artistas como Barbara Kruger, Sherrie Levine o Cindy Sherman centraron gran parte de su obra en la la reapropiación del cuerpo de la mujer que había sidosegún Pollock y Parker “colonizado, apropiado, mistificado y definido por la fantasía del hombre, analizarán para ello los medios de comunicación, los medios de producción de imágen.

En los últimos años las artistas se enfrentan al desafío de cómo abordar el feminismo en el contexto teóricamente igualitario del siglo XXI pero cuentan con la ventaja de un ambiente de debate que parece ser másrico y dinámico que nunca una vez que parecen superadas las limitaciones del feminismo clásico. Hoy en día los nuevos feminismos van mucho más alla de la lucha por la igualdad legal. Tienen claro que el sujeto político del feminismo son más las propias mujeres que la vieja oposición dialéctica entre los dominadores (hombres) y las (dominadas) mujeres y se abren a una pluralidad de perspectivas...