Artículo para el 25 de mayo publicado en diario el tribuno
Sucede que a lo largo de todo el siglo XIX, la disputa central será discernir yoptar entre federación o centralización; del nivel de autonomía de las provincial frente al Estado. Muchos caudillos del interior optaron por un sistema confederal que otorgaba pleno poder y autonomía a las provincias frente a un estado débil. Prueba de ello es la caída del directorio hacia 1820, tras sancionar una Constitución en 1819 que no respetaba las autonomías provinciales. También fracasóla Constitución de 1826 similar a la sancionada en 1819.
Con el Congreso General Constituyente que sancionó en 1853 la Constitución Nacional, se adoptó un sistema de gobierno representativo, republicano y federal. La teoría estaba resuelta pero la realidad era que Buenos Aires no aceptaba esta Constitución que implicaba tener que desprenderse proporcionalmente de los impuestos aduaneros que erael principal ingreso y soporte de la provincia, para distribuirlo y dar sustento al Estado Nacional. La organización federal como lo establecía la Constitución quedó frustrada hasta la capitalización de la ciudad de Buenos Aires en 1880. hasta ese momento, el poder ejecutivo Nacional era inquilino en una provincia que se arrogaba el poder de dar residencia provisional al Poder Ejecutivo que teníaque enfrentar constantemente el poder de un gobernador que muchas veces tenía mas poder e influencia que el presidente de la Nación. Esto cambia sustancialmente con el primer gobierno de Roca que reside ya en la ciudad autónoma de Buenos Aires, sede del gobierno federal por ley.
La historia del país en el siglo XIX sigue una constante que es la lucha entre las provincias del interior quesupieron ceder prerrogativas como por ejemplo la eliminación del impuesto de aduanas, su principal fuente de ingresos, porque era un obstáculo si se quería conformar un territorio unido económicamente, frente a Buenos Aires que tuvo que presentar batalla para terminar aceptando su papel federal cediendo parte de su renta y de su territorio, algo por lo que aún se sigue discutiendo y es menester de losrepresentantes de las provincias en el Senado seguir exigiendo.
Desde un punto de vista institucional organizativo y jurídico, somos un país federal pero que, a casi ya doscientos años de historia nacional, sigue presentando esa asimetría entre el Interior y Buenos Aires que se manifiesta en los hechos. Si bien es cierto, las Cartas Orgánicas de las provincias argentinas gozan de una autonomíainstitucional y gubernativa importante, no sucede lo mismo desde el punto de vista económico ya que muchas de ellas no alcanzan unos mínimos de autarquía y es allí cuando comienzan a fallar los mecanismos institucionales que equilibran la relación entre el gobierno nacional y las provincias, haciendo de éstas ultimas unas cautivas del poder ejecutivo cuando se tiene que diseñar el mapa...
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