Balanza de pagos

NOMBRE: CLAUDIA IRENE GONZALEZ BRAVO MATERIA: HISTORIA

LA HERENCIA DE LOS SANTOS, O EL TRANSITO DE LA SERVIDUMBRE AL TRABAJO ASALARIADO

A la sombra de la finca

La finca, como se le llamaba a la hacienda, era la unidad de producción socialmente más importante: de su estructura y de su universo largamente gestado dependía gran parte de la vida económica. Por eso en 1914 la regiónaparecía, para quienes llegaban de fuera, como una continuación absurda de la época colonial. Su casa grande de largos corredores andaluces; el conjunto de sus andaluces; el conjunto de sus caseríos agrupados alrededor de la sombra bien hechora de las ceibas; su mundo social, de milperos indios o ladinos pobres y de hombres de acaballo cuya insolencia recreaba cotidianamente la dominación de ladinoscomerciantes y banqueros sobre un vasto océano de agricultores; todo, a nivel de la finca era un Chiapas en miniatura. Un conjunto de caudillos y gobernadores finqueros imponiendo la ley a su manera, en un país de peones e indios libres ligados al patrón por deudas, agradecimiento, mutua complicidad, resto de tributo y repartimiento.

Pero si la finca tradicional era social y políticamente dominante,erigida desde el siglo XVI y la crisis posterior como esencia del régimen colonial la pujanza mayor correspondió desde el fines del siglo pasado a plantaciones de tipo más claramente capitalista que se asentaron en las regiones semitropicales cuya población había sido diezmada por las crisis y las epidemias de la época colonial. Si arribo marca después del auge del cacao y del añil, una más clarainserción de la región en el mercado nacional y mundial agroexportador. Estas grandes y medianas plantaciones en propiedad de alemanes y norteamericanos dedicadas al cultivo de café y de caucho y a la extracción de madera y resina refucionalizaron pronto en su interior relaciones de producción que provenían en lo fundamental del particular sistema de servidumbre agraria regional. A un renacer delsemiescalvismo bajo nuevas condiciones y a relaciones de trabajo más impersonales que poco tenían que ver con las hasta cierto punto armónicas y estancada de la finca tradicional ganadera y maicera.

Como estas nuevas plantaciones se asentaron en su mayoría en los bosques semidespoblados, y su mano de obra provenía principalmente de las regiones montañosas. La existencia misma de esta permitiómantener bajísimos salarios dado que la economía campesina de autoconsumo ha pagado en parte la reproducción de esta fuerza de trabajo y el ejército de reserva. También la comunidad misma su cultura, su lenguaje etc., se produjeron a partir de entonces gracias a este trabajo temporal asalariado. Fue la que condujo a una interrelación profunda entre los altos y el soconusco. Esto explica comocriollos y ladinos como rancherada legitima tenia además no pocas contradicciones con los nuevos plantadores capitalistas extranjeros que venían a quitarles a sus indios. Hay que recordar que esta convivencia armónica entre hacendados y peones estuvo más lograda en los valles centrales que en los altos y la región norte.

Pero esta historia sin rupturas aparentes, nunca ningún modo de producción logroerradicar del todo las relaciones anteriores. Por ejemplo, la finca tradicional ganadera se expandió desde el siglo XVI muchas veces obre tierras abandonadas o devorando las tierras comunales, sin digerir del todo a las aldeas afectadas la comunidad reapareció entonces como una republica de indios. Años después de las plantaciones cafetaleras que proliferaron como hongos cayeron a su vezvictimas, también de este ritmo histórico, dándose cuenta los plantadores que para una mejor obtención de plusvalía era necesario conservar muchos de los métodos de la coacción extraeconómica tradicional.

Pero la argamasa ideológica de todo el complejo social que se produjo durante los siglos alrededor de la servidumbre es sin embargo y todavía reaparece por todos los poros del tejido social....