castellanas nuevas castellanas
Nuevas Castellanas
Las repúblicas
Los sedientos
Treno
El barbecho
Noche fecunda
¡Trisca, vaquerillo!
¿Qué tendrá?
Las sementeras
Canto al trabajo
Mi música
La montaña
Un don Juan
Los dos soles
El arrullo del Atlántico
La balada de los tres
Ana María
Fragmentos de un poema
A correo vuelto
Al poeta José Rodao
La «Galana»
El amoCanción
Dos nidos
La tregua
1
Índice alfabético
Amo, de aquella cuestión
A ti, de Dios venida
Ayer por la tarde
Con el relente que le da tempero
¿Dónde irá sola Teresa
En el nombre de Dios canto la vida
En el nombre de Dios que las abriera
Enfrente de mi casa yace en ruinas
¡Hablemos, atalaya gigantea!
He admirado el hormiguero
Naturalesarmonías
No piense nunca el lloroso
¡Pobrecita madre!
¿Por qué llora el vaquerillo?
¿Qué tendrá la hija
¿Sablazos entre poetas?
Tengo el alma serena
Una alondra feliz del pardo suelo
Vagando va por el erial ingrato,
Vámonos al hastial de la sala
Ya dejó sus mocedades
Ya pasaron, ya pasaron
2
NuevasCastellanas
José María Gabriel y Galán
[Nota preliminar: Edición digital a partir de la de Obras completas, 6ª ed., Madrid, Aguilar, 1973, pp. 129-228, (1ª ed., 1941) y cotejada con la edición de Obras completas, Badajoz, Universitas, 1996, pp. 83-158).]
3
Las repúblicas
- I -
He admirado el hormiguero
cuando henchían su granero
las innúmeras hormigas.
He observado su tarea
bajo el fuego que caldea
la estación de las espigas.
Esquivando cien alturas,
y salvando cien honduras,
las conduce hasta las eras
un sendero largo y hondo
que labraron desde el fondo
de las lóbregas paneras.
Y enhileras numerosas,
paralelas, tortuosas,
van y vienen las hormigas...
La vereda es dura y larga,
pesadísima la carga
y asfixiantes las fatigas;
mas la activa muchedumbre,
sobre el hálito de lumbre
que la tierra reverbera,
senda arriba y senda abajo,
se embriaga en el trabajo
4
que le colma la panera.
Son comunes losquehaceres,
son iguales los deberes,
los derechos son iguales,
armoniosa la energía,
generosa la porfía,
los amores fraternales.
Si rendida alguna obrera
por avara no subiera
con la carga la alta loma,
la hermanita más cercana,
con amor de buena hermana,
la mitad del peso toma.
Nadie huelga ni vocea,
nadie injuria ni guerrea,
nadie manda niobedece,
nadie asalta el gran tesoro
nadie enceta el grano de oro
que al tesoro pertenece...
He observado el hervidero
del innúmero hormiguero
en sus horas de fatigas...
Si en los ocios invernales
sus costumbres son iguales,
¡son muy sabias las hormigas! 5
- II -
He observado la colmena
al mediar una serena
tardeplácida de mayo.
La volante, la sonora
muchedumbre zumbadora
laboraba sin desmayo.
¡Qué magnífica opulencia
la de aquella florescencia
de los campos amarillos!
Madreselvas y rosales,
agavanzos y zarzales,
mejoranas y tomillos...
Todo vivo, todo hermoso,
todo ardiente y oloroso,
todo abierto y fecundado:
los perales del plantío,
los cantuesosdel baldío,
las campánulas del prado...
Y en corolas hechiceras,
y en pletóricas anteras,
y en estilos diminutos,
y en finísimos estambres,
van buscando los enjambres
las esencias de los frutos. 6
Y los finos aguijones
en robadas libaciones
van llevando a los talleres
lo mejor de la riqueza
que vertió Naturaleza
por los...
Regístrate para leer el documento completo.