Cero Ideas y Cien Ataques: Balance De La Campaña Electoral 2011

¡TERMINÓ LA CAMPAÑA! Y MI BALANCE ES: CERO IDEAS Y CIEN ATAQUES
(VAYA…, CREO QUE ME EQUIVOQUÉ, ESPERO NO HACERLO AHORA)

Tengo que ser sincero. En este punto, ya las ganas de escribir este artículo se me habían ido diluyendo conforme pasaba el tiempo. Tal vez porque esperaba que, conforme fueran avanzando los días, las personas irían dejando de lado la cuestión electoral para pasar a comentarotro tipo de noticias… Evidentemente, me equivoqué.

Sí, y esto porque la aproximación del “día final” ha generado una tendencia a la extrema confrontación respecto a qué postura política se adopta, por lo que creo que no hay lugar en el cual no haya trascendido el tema político. Así, en la peluquería, me preguntaban por quién voy a votar con la clásica frase predecesora: “Imagino que votará por…, ¿no?”, dando a entender que la elección del otro candidato o candidata sería la peor atrocidad que pudiese cometer; en la farmacia, encontré al farmacéutico discutiendo con dos vecinas por el pasado tormentoso que tenía tal o cual postulante; en la combi, el cobrador y el chofer concordaban en el voto que emitirían y rajaban de los que votarían por la otra persona; en el restaurante, el meseroavasallaba a la cajera con “argumentos” para no votar por “fulano (a)”; entre otras tantas situaciones tupidas de pasión y enfrentamiento. En ese estado de cosas, y contrario al “debate de ideas” que esperaba escuchar, me he encontrado con dos cuestiones claras: INTOLERANCIA e IMPRODUCTIVIDAD, lo que ha generado desunión, incluso al interior de familias que solían considerarse cohesionadas yfelices; y en las que no lo eran, ya mejor ni decirles… Por ello, cuando pensé que los ataques inútiles cesarían y las ideas aterrizarían, creo que también me equivoqué.

Así, para volver al tema concreto, podemos señalar como muestra representativa de las banalidades que les comento, unos mensajes que tal vez les suenen conocidos, y a los cuales solemos llamar: “CADENAS”. Sí, esos correoselectrónicos que reenviamos personal o automáticamente, y de manera sistemática, a todos (o a casi todos) nuestros contactos, entendiéndose que suscribimos lo que dicho mensaje contiene. Creo que ya saben a qué me refiero, ¿verdad? Bueno, ahora, esos mensajes han pasado de transmitir un consejo de vida, un chiste, un deseo de felicidad, una oración o un pedido de ayuda para alguien, a convertirse en elvehículo adecuado de nuestros instintos destructivos que cada día parecen acrecentarse sin cesar (y lo digo, sobre todo, por el inclemente número de estas cadenas que vengo recibiendo hasta el día de hoy). Sí, ese ánimo de pelea y revancha que todos tenemos por dentro y que buscamos descargar en algún momento, se ha concretizado en frases como: “prensa basura” o “no al retorno de un gobierno corrupto,asesino e infame”; así como: “Es evidente el nexo con Chávez”, “Seremos el patio trasero de Venezuela” o “no a la pérdida de las grandes inversiones para nuestro país”.

Y aquí debo confesarles también, que pensaba que en este tipo de mensajes (las populares “cadenas”), no existiría mayor incidencia de nuestra politiquería; pero nuevamente, me equivoqué. Tan es así, que como lo he demostradolíneas arriba, estos correos que antes uno solía leer en algún momento de tranquilidad u ocio (sea con alegría, aburrimiento o nostalgia), pasaron a convertirse en una herramienta más para manifestar aberración y desprecio por el contrario o contraria, y siempre a través de frases que si bien pueden tener algo (o mucho) de cierto, debido a su carácter nocivamente agresivo, terminan por convertirse másbien, en una manifestación abusiva del derecho a la libertad de opinión y de expresión que sólo difama e injuria, lo cual está proscrito por el artículo 103º de la Constitución y el Código Penal, porque aunque no nos guste, ninguno de los dos tiene una condena firme por algún delito; pero, ¿a quién le importa la Constitución u otras normas cuando se trata de golpear a quién nos desagrada,...