Competencia comunicativa

El tema que a continuación presentare es de suyo polémico, razón que me lleva a ampararme con una pequeña reflexión respecto a dos, de muchos de los factores que determinan el comportamiento humano, estos son:

- Nuestras creencias y
- Nuestras significaciones.

Nuestro basamento de creencias es todo aquello que desde la cuna nos han enseñado a creer. Esto que es de granimportancia, ya que “el destino de un ser humano esta subordinado en muy buena medida al conjunto de creencias que sigue consciente o inconscientemente, y que le gobiernan la vida”.

Por otro lado, nosotros calificamos lo que nos pasa, oímos, hacemos o vemos, en función de lo que las cosas nos significan. Lo que nos significa es lo que nos hace elegir una cosa sobre otra; la estabilidad a lainestabilidad, la certeza a la incertidumbre y lo fijo sobre lo variable.

Así, pues, nuestras CREENCIAS Y SIGNIFICACIONES son las que nos hacen ver y entender el mundo de una determinada manera, separando de él todo aquello que no encuentre cupo en estas dos dimensiones.

Entremos al tema, que demanda una apertura al marco de estas dos dimensiones

Educación –Sociedad –Formación de Empresarios.

Elejercicio empresarial en nuestro estado (y seguramente en nuestro país) sufrió mutaciones interesantes en los sesenta años comprendidos entre 1940 y 2000.

En el Estado de Nuevo León, en 1940, de cada 100 ciudadanos que estaban en edad y capacidad de trabajar, 14 eran empleadores y 50 formaban parte de la nomina de los primeros, mientras que 24 trabajaban por su cuenta. Sesenta años después,con una inmensidad de profesionistas disponibles, solo 3 de cada cien son empleadores y 77 se encuentran en la nomina de estos, mientras que 15 trabajan por su cuenta, en el auto empleo.

En términos de proporcionalidad, la conformación de la pirámide laboral ha cambiado: hay un 81% menos de empresarios y un 53% más de empleados.

La fuerza de la inercia nos ha llevado a un nivel de confort queha adormecido el espíritu empresarial. En los hogares, escuelas y empresas edificamos hombres con una sola ambición, colocarse en una buena empresa y trabajar con esmero para alcanzar los beneficios que los puestos altos otorgan, perdiendo con ello la oportunidad de potencializar tanto el capital humano como el material.

Una de las más arduas tareas de un país es “mejorar el índice debienestar de su gente con una mejor y más amplia distribución de la riqueza.” Esto ultimo nunca se logrará a través de la generación de empleos, seis décadas ya lo han demostrado, no es sino a través de la generación de nuevos empresarios, los cuales, sumados a los ya existentes, que la productividad del país llegará a cuotas nunca vistas.

La actividad empresarial desde el punto de vista del numerode personas que la ejercen, ha disminuido en un 81%, concentrándose en un número cada vez más reducido de personas. “Se nos ha olvidado que la riqueza esta íntimamente ligada a la producción. Para tener más hay que producir más.”..................................

Las razones de este cambio son múltiples. La primera de ellas, y la más importante de todas, es que la sociedad, “estacionada en lazona de confort” ha sacralizado lo uniforme, “la seguridad de un empleo”, y a la vez ha satanizado lo disconforme, el riesgo que implica emprender, al grado tal que lo que más llama la atención no es el deterioro del ejercicio empresarial, sino la apatía que poseemos al respecto.

Hace sesenta años México era un país en el que el autoempleo era una constante. La educación familiar se orientaba mása la producción que al consumo. Los hogares eran centros productivos en donde todos los miembros de la familia tenían una responsabilidad. Los hijos no solo tenían que cumplir con su escuela. Les era menester aprender un oficio y contribuir con lo poco que pudieran al gasto familiar. Los padres se preocupaban más por la educación del carácter de los hijos que por la instrucción que estos...