comvivir con las dantas

CONVIVIR CON LAS DANTAS
"EL CARÁCTER DESTRUCTIVO".
Este libo hace referencia comenzando un análisis muy meticuloso al oriente de la cordillera andina, en el Bajo Caquetá - Putumayo colombiano,donde han vivido desde tiempos inmemoriales los pueblos "Witotos", apelativo con el cual se designa a diversas sociedades nativas de lenguas diversas que, sin embargo, comparten en términos globales unmodelo similar de organización social: tradicionalmente vivían en malocas, o casas colectivas; el grupo local estaba conformado, por lo general, por los "propios de maloca- y otras personas subordinadas; la autoridad del jefe se fundaba en su carácter de promotor de la vida ritual y ceremonial; una gran parte de las casas disponía de tambores (manguarés) y "palos de danzar" (multiplicadores),entre otros objetos ceremoniales; y el sistema económico se fundaba en la agricultura de roza y quema itinerante, la caza y la pesca.

Si bien desde hace varios siglos estas poblaciones han tenido contactos con las sociedades mayores coloniales o nacionales, de algún modo permanecieron aisladas hasta principios de siglo, debido a la presencia de raudales o a la lejanía relativa de sus territoriosancestrales en relación con los principales núcleos de colonización. Desde entonces su territorio fue brutalmente invadido por caucheros de diversa procedencia, y se provocó un genocidio y etnocidio de incalculables proporciones.

Hoy en día muchos de los antiguos grupos nativos se concentran en diversas localidades a lo largo de los ríos Caquetá y Putumayo, o de sus principales afluentes(Ligará-Paraná, Cara-Paraná); y además de sus actividades tradicionales, muchos de sus hombres y mujeres están integrados a un precario mercado de trabajo local, o vinculados a la vida de ciertos asentamientos "blancos" (Puerto Leguizamón, Leticia, etc.)

Sin embargo algunos pequeños grupos disponen de ganado vacuno, gallinas y puercos, o adquieren carne en las precarias famas o mataderos locales,la mayoría de ellos obtienen una importante proporción de la proteína de origen animal que necesitan, a través de la "carne de monte", y particularmente de pequeños mamíferos, la danta y los cerrillos, o diferentes gallinetas, además de la pesca y la captura de tortugas y larvas, entre otras.

Todavía una de las actividades importantes de los hombres está concentrada en la cacería, aunque ahorase haga con escopetas y caigan cada vez más en desuso instrumentos tradicionales de caza como las cerbatanas, las jabalinas y ciertas trampas mayores. Con frecuencia los hombres parten durante el día o en las horas de la tarde hacia el monte en busca de comida; y en algunos casos la cacería es ampliamente anunciada, en especial cuando se trata de visitar un "salado" para "matar danta".

Enparte esta lectura muestra lo sobresalientes de la cacería del tapir, y de las diversas expectativas, ideas y prácticas sociales y simbólicas ligadas a la misma, con base en algunas visitas realizadas a un salado cercano a la comunidad Andoke del río Aduche -en el Medio Caquetá. También se basa en comentarios del doctor Jon Landaburu, así como en algunos datos etnográficos recogidos con él, y envarias entrevistas centradas en este tópico, realizadas en Bogotá con Eudosio Becerra Vigidima -nativo Witoto del Cará-Paraná. Por todo ello, el autor, se ha restringido a la "región Witoto", absteniéndose de emprender su estudio en otras áreas de la Amazonia colombiana. En un reciente trabajo sobre la significación de la danta para los pobladores Tukano del Vaupés; en pocas palabras, Reichelsostiene allí que la danta es un símbolo de los pueblos Arawak y condensa la relación histórica entre los Tukano y Arawak en el noroeste amazónico.

Igualmente, Reichel ha presentado un bien logrado estudio etnográfico sobre la danta en el río Mirití- Paraná, en el área que podríamos denominar Yukuna, al norte de los pueblos Witoto. Una parte importante del trabajo que se presenta, tuvo su origen...