Crecimiento demografico
Pero ahora se reconoce cada vez más que ni siquiera las tasas de crecimiento del PNB de 5 por ciento, 6 por ciento o más, representan un desarrollo real, independientemente de que una gran parte de ese crecimiento es absorbida por el incremento de la población. Ahora es claro que el rápido crecimiento de la producción puede ir acompañado, y de hecho va acompañado, del empobrecimientocreciente de grandes grupos de la población, de un rápido incremento del número de personas que viven por debajo de cualquier nivel de la pobreza aceptable, del aumento del subempleo, y de una incapacidad general del proceso de desarrollo para involucrar a una parte mayor de la población. En consecuencia, me parece que no podemos dejar de afirmar que no vemos, en general, un desarrollosatisfactorio en los países pobres, y esto a pesar de la acumulación sin precedentes del conocimiento del por qué y del conocimiento del cómo. ¿Por qué ocurre esto?
Mi tesis es que ello se debe precisamente a la acumulación de la ciencia y la tecnología, o mejor dicho a la naturaleza específica de esta acumulación. Es por ello que vemos tales fracasos generalizados del desarrollo real entre los paísesque llegan más tarde, contra el optimismo irreflexivo de otras épocas.
Esta tesis puede ilustrarse mejor señalando dos desproporciones notables. La primera desproporción puede advertirse en el hecho de que, con una tasa de crecimiento demográfico por lo menos tres veces mayor que la de los países ricos, los países en desarrollo de hoy deben crear -por millón de habitantes- tres veces más empleosnuevos; pero deben hacerlo con recursos que apenas llegan tal vez a un vigésimo o menos del total de los recursos de los países ricos. Esto significa que los recursos por empleo requerido apenas llegan a un sexagésimo o menos. Esto significa a su vez que, si los países en desarrollo de hoy trataran de crear empleos de la misma clase y con la misma tecnología que los empleos de los países ricos dehoy, sólo un sexagésimo de sus nuevos buscadores de empleo, o sea menos de 2 por ciento, se emplearían en efecto con normas "modernas". El resto, más de 98 por ciento, permanecería desempleado. Por supuesto, la situación real no es tan sombría. Un número mucho mayor de los empleos se encontrará en los sectores rurales y otras ocupaciones que requieren menos capital por empleo, y la tecnología...
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