Critica de cine: habana blues

Ritmo habanero llega a la gran pantalla

Habana Blues, una película de Benito Zambrano, nos traslada a la controversial, pero mágica ciudad de La Habana, Cuba, incomparable con ningún otro lugar enel mundo, y nos permite tener frente a nuestros ojos el verdadero estilo de vida en la isla fascinante.

El director español nos brinda la oportunidad de apreciar su más reciente producción, cubanaen esta oportunidad, Habana Blues. El drama cuenta la historia de Ruy Santos (Alberto Joel García) y Tito García (Roberto Álvarez), dos jóvenes unidos por una fuerte amistad y una pasión en común; lamúsica. Luego de acompañarse durante toda una vida, son descubiertos por un grupo de productores españoles que deciden proponerles un contrato que los llevará lejos de la isla. Sin embargo lascondiciones que proponen no siempre les favorecen. A pesar de vivir en un clima difícil en medio de graves conflictos sociales y de la dictadura más larga de la historia, muchas cosas atan su vida a laciudad donde nacieron. Deberán poner en una balanza varios valores importantes: la familia, la amistad, la pasión por el arte y el éxito material.
La música que recrea la película juega un papelfundamental. La banda sonora que colaboró con la producción de esta película ha logrado cierta fama a partir de la historia de la que formaron parte. Y es que el ritmo cubano no tiene comparación con ningúnotro genero. No hablamos solamente de su tónica alegre y de su swing inevitablemente bailable, sino también de sus letras que hablan de la realidad que existe en el día a día y en los corazones de todonativo de la que muchos llaman la isla fascinante, que es también la isla del olvido.
El guión de Habana Blues nos permite entrar a la historia de manera que pocos podrán levantarse de las sillassin un húmedo y emocionado rostro. Nos hará sonreír con las ocurrencias de sus personajes. Nos hará reflexionar, valorar lo que disfrutamos mientras otros no pueden, la grandeza de la libertad.
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