Cuento "decidiendo el futuro"

La vida es sin destino, nosotros mismos hacemos nuestro presente y así vamos escribiendo paso a paso nuestro futuro más cercano, es esto lo que hacemos todos los días de nuestra existencia, a vecesestúpida, inocua y vacía, como es el caso de Allan, un señor adinerado y conocido en el pueblo verde de Acton; gruñón y solitario, para las nuevas generaciones del pueblo aquel señor siempre ha estadosolo, más la realidad siempre se encontrará en la gran sabiduría de la gente anciana, pues Rosario, fue su única esposa, en aquella época no era tan huraño, pues su esposa era invitada a reuniones yfiestas en donde los dos eran el centro de atención por su único y envidiable amor; ser felices juntos, pero como si fuese ley de la vida, la felicidad humana siempre se termina cuando en su cumbre seencuentra, ya que la feliz mujer murió, por una inyección fatal de escorpión, y como si el veneno se hubiese trasplantado en amargura y resentimiento se posó en su esposo Allan ya hace veintisieteaños, que desde aquel momento solo recauda dinero.
Allan se levanta un día normal en Acton perturbado y desesperado, se da su baño matutino, se viste con su monótono traje de paño, su sombrero y salecon su paraguas cerrado y utilizándolo como bastón como todos los días desde aquel trágico momento, lo extraño, lo extraño fue que no tomó la misma ruta que todos los días, las personas del pueblo seasustaron unos miraban al cielo pensando en un cataclismo, otros reían y otros solo lo miraban con extrañeza, pero él ni se inmutaba en su paso exacto uno tras otro haciendo sonar con tal exactitud eltacón de su zapato.
Mira hacia los lados en una esquina y pasa, la gente aún sigue asombrada, llega a un parque en donde encuentra una silla y se sienta, pone su paraguas al lado vacío del asientopreviniendo que ninguna persona se atreva a sentarse abre su saco y toma un sobre abultado, al cual le echa un pequeño vistazo y asiente con la cabeza, aunque no se siente muy a gusto con lo que...