cuento personal

Habia una vez un joven de nombre Yair Martinez, el vivía en un pequeño pueblo lleno de alegría, paz y armonía; su vida era demasiado normal,trabajaba como promotor de ventas en otros pueblos en la semana y sus fin de semana se dedicaba a jugar futbol, no era nada malo en el deporte por lo quetodo el tiempo estaba rodeado de admiradoras, en el trabajo tampoco podía quejarse, su carisma lo hacia un gran vendedor, era un joven con unaseguridad inmensa, mente abierta y siempre conseguia lo que se proponía. Claramente no era hombre de una sola mujer, pues nunca tomaba nada enserio.
Unatarde de enero se realizo una contratación de empleados en su empresa, donde solo lograron entrar 2 empleados, un chico de nombre Enrique Jacks y unalinda joven de nombre Keyden Corss, Yair como era de esperarse quería capacitar a la joven pero ella lo rechazo pues ella es una joven muy seria queno le gustan los patanes.
Ese rechazo hizo odiarla profundamente, pues jamás en su vida lo habían rechazado –no es tan bonita. Decía el. Y asipasaron los meses siendo indiferentes, hasta que una mañana el gerente reconocio el mejor empleado del mes, nunca se habia visto tan entusiasmado en hablarasi de un empleado –capaz, inteligente, seguridad. Esas eran las palabras del gerente. Yair creyó que se trataba de el, estaba a punto de levantarsecuando quedo perplejo: Keyden Cors. Todos aplaudieron con gran admiración pues Keyden se habia ganado el respeto y la admiración de muchos.