Cuidate Claudia Cuando Estes Conmigo

Páginas: 14 (3470 palabras) Publicado: 16 de octubre de 2011
1. El Gordo Pepe

l primer poema que escribí fue un espanto, en el instante en que lo terminé eché por la borda todo aquello que mi pobre padre me enseñó en tantas lecturas, tantas veces, alrededor de la mesa familiar, la famosa sobremesa casera. Años y años escuchando y leyendo poesía, la buena poesía, la de los grandes, los clásicos, esa poesía que resuena como un tambor antes de entrar enbatalla o aquella otra que silba como un pájaro melancólico frente a la última luz del atardecer o la que acaricia como la mano de la madre que sostiene entre los brazos a su recién nacido. Sin contemplaciones, la destruí toda. Aún hoy, recordar mi primer poema me genera una melancólica vergüenza, sin embargo, desastroso y rengo, sigo pensando que fue mi mejor poesía. No porque mereciera algo másque la compasión del olvido, sino porque en sus versos desfasados y arrítmicos hablaba yo con mi primera voz, una voz limpia, sin temor, sin cortapisas, sin el miedo paralizante al qué-dirán que tantas veces después ha regido mi literatura. Ese fue un poema visceral, claro y honesto, sin ningún talento, sin ningún encanto, pero lleno de esa verdad, maravillosa y desfachatada, a la que solo seatreven los niños, los borrachos y los locos. ¿Cómo iba yo a saber que no sabía nada?, que no bastaba con mis ganas de escribirle a Claudia para hacerlo

E

23

bien, que la melodía, la cadencia, la belleza rítmica de un poema, su sonoridad y su calidad, estaban más allá de un par de rimas forzadas al final de una serie de versos apretujados en cada línea, en cada estrofa, en cada intento. Ademásde ser un mal poema, mostraba ya —eso lo supe muchos años después, conversando con Josefa y con Gloria María— esa inclinación mía por menospreciarme, por andar pidiendo disculpas por lo que escribo, por ponerle excusas a mis palabras (Josefa me dice que debo «creérmela» y no andar como mendigando permiso por cada frase que se me ocurre, mientras que Gloria —menos tierna pero tal vez más objetiva—aclara que mi actitud «es una farsa, una falsa modestia, porque tú eres un vanidoso»). Aún guardo en algún rincón de mi biblioteca, en medio de las hojas de un libro maltrecho que hace años no consulto, mi primer intento, mi primer fiasco, mi largo poema de amor con que no hubiera podido enamorar a nadie que tuviera un buen oído o alguna idea de lo que la palabra «estética» significa. Cómo seráde obsesiva la culpa que me persigue que todavía recuerdo los primeros versos recargados, acomplejados y rendidos: «Yo, que nadie soy, / de ti me enamoré cuando te vi. / Tú, ¿qué eres? Mi vida, mi aire. / ¿Qué haría yo sin ti…». Supongo que entonces era verdad, entonces me sentía nadie o nada o invisible o intrascendente o como fuera que mejor se pueda decir que me sentía incapaz de llamar laatención de las muchachas que empezaban a brillar a mi alrededor. Yo no era como Carlos, el que hacía maravillas con la pelota en la cancha de fútbol, creando jugadas, cambiando el ritmo, «haciendo magia», como él mismo me decía; o como Castorcito, el defensa del equipo, al que todas las chicas miraban entusiasmadas mientras él agitaba su melena amarilla como la del león que se creía, aunque le dijeranCastorcito y aunque Claudia alguna vez me confesara incrédula: «¿Castorcito es un galán? Mal apodo, suena más como de niño encerrado en su cuarto, estudiando

24

y comiendo nueces o manzanas o algo así... Si lo llamaran «león», o sea no león, pero un nombre más, no sé, «Rey de la Selva», pero ¿Castorcito?, si escribieras una novela nadie te creería que él es un galán…»; o como Alonso, quetocaba la guitarra como nadie, y hacía maravillas con la batería, y cantaba canciones de amor a todas las muchachas hermosas que suspiraban cuando eran alcanzadas por esos ojos verdes melancólicos que tenían la cualidad de convertir a esa inmensa construcción de músculos feroces en un muchachito dulce y tierno; o como Nicolás, que aún negado para los deportes y las competencias de fuerza, poseía...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • Cuídate Claudia, cuando estés conmigo
  • Cuidate Claudia Cuando Estes Conmigo
  • motivo por el nombre cuidate claudia cuando estes conmigo
  • Resumen De La Obra Cuídate Claudia Cuando Estés Conmigo
  • cuidate claudia cuando estes conmigo
  • "cuídate Claudia cuando estés conmigo"
  • Cuidate claudia cuando estes conmigo
  • cuidate claudia cuando estes conmigo

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS