De La Ciudad Informal Y La Titulacion De Predios

DE LA CIUDAD INFORMAL Y LA TITULACION DE PREDIOS

Según la definición operativa de ONU, un asentamiento informal, es un “hacinamiento crítico, con un estado precario de la vivienda (en relación a su estructura física y a su entorno), ausencia de algunos de los servicios públicos e ilegalidad de la tenencia.” Este fenómeno no es propio de las ciudades en vía de desarrollo, pues son muchos losfactores que influyen en la aparición del urbanismo ilegal, eventos infortunados como el desplazamiento generado por la violencia, el alto costo de la tierra y la falta de políticas públicas que permitan que la población vulnerable o más pobre, tengan la posibilidad de contar con una solución de vivienda digna y por supuesto legal, hacen que los pobres vean cada vez más lejos la posibilidad deacceder a la ciudad formal.

Medellín es la ciudad colombianaque más desafíos ha enfrentado eneste sentido, pues en un primer éxodo de habitantes del campo a la ciudad por el auge de la industrialización puso a la ciudad en jaque por la enorme demanda de vivienda y aunque, a pesar del esfuerzo público-privado para cubrir las necesidades de los nuevos habitantes,las medidas fueron ineficaces. Enlas últimas décadas la ciudad se ha visto abocada a enfrentar con uno de los fenómenos más crudos y hacedor del urbanismo ilegal como el desplazamiento, “que ha duplica su población ycomienzan a aparecer en las áreasmás inaccesibles y en los suelosmás periféricos asentamientos deorigen informal bajo la figura deurbanizaciones piratas y de barriosde invasión.”

“Como resultado de este procesoMedellín,de acuerdo a la clasificación de susuelo según El Plan de Ordenamiento Territorial (POT), tiene un25% de su territorio en barrios condiferentes niveles de marginalidad,por un total de 2400 ha. 900 ha definidas como áreas de MejoramientoIntegral (MI), con asentamientos encondiciones de precariedad y segregaciónsocio espacial. 1500 ha definidas como Consolidación de nivel3, con un déficitcrítico en dotaciónde infraestructura, espacio públicoy equipamientos, pero con un mayornivel de consolidación, que facilitasu articulación a la ciudad formal.” Esto corresponden a las áreas con el menor índice de calidad de vida yde desarrollo humano (Alcaldía deMedellín, 2004) es decir, los estratos 1 y 2 con el agravante que “coinciden con los sectores con el más alto índice deviolencia.” Sin embargolas administraciones públicas y la academia, han venido implementando estrategias para transformar la calidad de vida de los habitantes de los barrios marginales, y “compensar parte de esa deuda social acumulada en décadasde inequidad.”
Está claro que la odisea de la ciudad informaly sus condiciones de inequidad, violencia y segregación, no es discursos de un recuerdo de pasado dramático ydoloroso, sino una condición que en la actualidad, administración y ciudadanía siguen pensando y planificando, en pro de la construcción de una ciudad formal, con servicios, equipamiento, calidad de vida Y un mínimo de equidad para sus habitantes.
El mejoramiento de las condiciones habitacionales y de la calidad, de vida de los habitantes de los barrios subnormales, urbanizaciones ilegales, seconvirtió en tema fundamental de la agenda pública y reto para la administración municipal, pues como resultado de ello, se empieza a hablar de políticas de mejoramiento e implementación de acciones que permitan mejorar las condiciones físicas de los asentamientos ilegales y su posterior incorporación a la ciudad formal, pero esto implica no solo formalizar los asentamientos, sino, dotarlo de unsistema de bienes y servicios públicos como: vías, parques, sistema de transporte, escuelas, equipamientos, mejoramiento de vivienda y como consecuencia importante, el otorgamiento de títulos de propiedad a los poseedores.

“Todos los colombianos tienen derecho a vivienda digna. El Estado fijará las condiciones necesarias para hacer efectivo este derecho y promoverá planes de vivienda de interés...