DEBERIA SER EL SILENCIO UNA DE LAS NORMAS DE AUDITORIA O DE ETICAS TRATADAS DESDE LA ACADEMIA?

DEBERIA SER EL SILENCIO UNA DE LAS NORMAS DE AUDITORIA O DE ETICAS TRATADAS DESDE LA ACADEMIA?

Es indudable que desde que Colombia firmó su independencia y se constituyó como república, trajoconsigo toda una serie de compromisos que ameritan como nación soberana, autónoma, económica y comercial. Consigo adentró a una serie de cerebros a especializarse en las leyes, en las políticas, en lasciencias directoras de los destinos económicos y mercantiles de los cada día crecientes ciudadanos, pero también trajo consigo ambiciones desmedidas de propios y extranjeros que iban colocando susojos en una de las joyas más preciadas del General Bolívar.
Con la aparición de estos cerebros nacionales y extranjeros, incrementa de forma paralela el auge de las universidades dedicadas a impartirlos conocimientos necesarios para regir los destinos de empresas, ciudades y naciones, dotando a estas unidades pensantes de herramientas adecuadas para la conducción de los destinos de estas unidadesproductivas.
Podemos imaginar como la clase de elite de aquel entonces mandaba a sus hijos a las mejores academias colombianas para que fueran aquellos los privilegiados en ocupar las grandescúpulas políticas, los grandes asientos gerenciales de las nacientes industrias públicas y privadas?
Avanza entonces el tiempo y con él se actualizan día a día las normas, las leyes, las políticas, fiscalesaduaneras, etc.; se incorporan leyes de fuente extranjera, se internacionalizan empresas, se abre el comercio a todo el mundo, se envían las unidades pensantes a aprender de los extranjeros, vienenmás academias y utilizan docentes internacionales….comienza las guerra política, sed de poder, se atacan unos a otros, cambian leyes, aumenta la carga de impuestos, se actualizan los códigos, aumentalas instituciones y la academia impávida observando como sus unidades pensantes preparadas en sus claustros desarrollan éticas personales de las cuales no hay reglamentación alguna ni está escrito...