Dinero y conciencia.

Dinero y conciencia.
¿A quién le sirve mi dinero?


La crisis de la conciencia.

Hace mas de 50 años Erich Fromm se preguntaba ¿es necesario producir seres humanos enfermos para tener una economía sana?
Hoy, inmersos en esta crisis económica, cabria incluso redefinir esta pregunta y aumentar su nivel de acidez: ¿es necesario producir seres humanos enfermos para tener una economía enferma?Hace poco mas de un año, vivíamos en un mundo donde los indicadores globales de riqueza se mantenían en alza dentro de un ciclo expansivo que duro casi tres lustros.
En ese momento de euforia económica parecía no haber mucho espacio para la reflexión serena. Se debía cabalgar en la cresta de una ola que crecía empujada por la embriaguez global, la ambición desmesurada, la percepción subjetiva deriqueza que generaba la extraordinaria facilidad de endeudamiento.
Alfred Marshall, notorio economista británico, afirmo poco antes de morir: he llegado a la conclusión de que la economía es un vano intento de narrar psicología. Apuntaba que todo proceso económico no es más que la manifestación de un conjunto de procesos psicológicos, conscientes e inconscientes, individuales y colectivos. Eneste sentido cabria pensar que la crisis económica que estamos viviendo no es mas que un síntoma de un proceso mucho mas sutil y complejo. Se trataría, de una crisis de conciencia entre cuyos ingredientes esenciales cabria destacar la avaricia, el egoísmo, el narcisismo, la paranoia, y abundantes trazos psicopáticos como la falta de sentido de alteridad, de responsabilidad, de integridad, de visiónsistémica.
En buena parte la impotencia actual es la consecuencia de la prepotencia del pasado y también de la ingenuidad a la hora de dar el poder a determinados sujetos cuya personalidad mostraba evidentes y alarmantes sintomas patológicos y de falta de decencia.
El gran problema que tiene el ser humano es que la cuesta vivir con la realidad, pero ello no impide que exista. Porque todarealidad que observable es el resultado de un conjunto de interacciones humanas, la realidad que vivimos no es mas que la manifestación necesaria y sistémica de la patología o la salud de la psike, del alama, de las personas implicadas en tal realidad.
De este modo, podríamos decir que la salud o patología psicológica de los individuos que integran y en especial los que gobiernan, un sistema tiende amanifestarse necesaria y sistemáticamente en los procesos y resultados observables de dicho sistema.
Kenneth Galbraith advertía: medir el progreso social casi exclusivamente por el aumento en el PIB, esto es, por el volumen de la producción influida por el productor, es un fraude y no es pequeño.
Porque la economía mas que cifras son personas. Desde los modelos actuales la persona es algosecundario y el protagonismo lo adquiere por un lado el consumidor (el que asume, gasta, devora) o el ser humano comprendido únicamente como medio de producción. Hoy son las cosas las que miden el éxito del sistema (vehículos, superficies construidas).
Esta será la primera de una secuencia de obviedades tan evidentes como que no podemos tener un crecimiento económico ilimitado en un mundo limitado.
Lacultura, la formación, la palabra, la conciencia son el único camino hacia la calidad. Peter Drucker afirmaba: todas las dimensiones de lo que supone ser un ser humano, y el ser tratado como tal, no han sido aun incorporadas al cálculo económico del capitalismo.
Melé ha sido testigo de las contradicciones de la banca como reflejo de las propias contradicciones de nuestra sociedad; de laimplicación del dinero en la realidad que nos rodea y de la vinculación que nos une a nuestros ahorros como seres responsables y con conciencia.
Melé descubre contradicciones, plantea preguntas y nos hace reflexionar sobre las incongruencias con las que convivimos cada día.
Si somos capaces de unir lo que pensamos, sentimos y queremos, podremos crear una gran corriente de conciencia. Ahí es donde...