Discernimiento Espiritual
Páginas: 5 (1246 palabras)
Publicado: 9 de mayo de 2013
El discernimiento espiritual
Se le llama discreción de espíritus.
Se determina cuándo un alma está movida por el Espíritu de Dios o por el espíritu de las tinieblas o por la propia fantasía.
Es necesario este conocimiento para el desarrollo correcto de la dirección espiritual.
Dice Godínez en la “Práctica de la teología mística”:
“Espíritu es una propensión del alma a una cosa buena omala. Un hombre que tiene propensión a la oración se dirá que tiene espíritu de oración… Si tiende a pleitos y altercados se dirá que tiene espíritu de contradicción… El que se inclina a la oración, compostura, modestia, silencio y buen ejemplo y habla, trata, piensa de cosas espirituales, se dice varón espiritual”.
El ser humano siente propensión en sus potencias apetitivas, la voluntad y en susfacultades sensitivas.
Son mociones que parten de la libertad e impulsan a la acción. Pueden provenir de la propia espontaneidad o de la insinuación de Dios o del demonio.
El discernimiento de los espíritus consiste, pues, en averiguar en estos movimientos de la voluntad, sus propios principios (divinos o demoníacos).
Existen dos clases de discernimiento: adquirido e infuso.
Eldiscernimiento adquirido complementa la práctica de la dirección espiritual y puede desarrollarse por diversos medios.
El discernimiento infuso es una gracia (gratis dada) concedida por Dios a algunos santos (por ejemplo, Ana Catalina Emerick, Pío de Pietrelcina, Juan María Vianney).
Este tipo de discernimiento es infalible. Procede del Espíritu de Dios. Es carismático.
El discernimientoadquirido
Es una habilidad especial para examinar los principios y efectos de los movimientos del alma. Se deben contrastar con las reglas que ofrece la Escritura Santa y la Tradición cristiana. Debe dictaminarse si tales movimientos vienen del Espíritu de Dios, del espíritu de las tinieblas o de la propia imaginación extraviada.
Estos son los medios para alcanzar este arte divino:
La oración:Es el más importante y fundamental. Se debe solicitar a Dios los caminos de santificación de determinada alma. A esta solicitud responde Dios con el auxilio de la Divina Providencia que nos permite desempeñar nuestros deberes y obligaciones.
El estudio:
Es preciso conocer los datos que nos aportan la Sagrada Escritura, los Santos Padres, los teólogos y maestros de la vida espiritual.
Laexperiencia propia:
Como arte eminentemente práctico se impone la experiencia personal. Debe acostumbrarse a recibir la luz divina en la oración, en el trato íntimo con Dios.
La remoción de los obstáculos:
Debe suprimirse el espíritu de autosuficiencia que lleva a decidir por causa propia sin consultar jamás. Los espíritus soberbios pierden las gracias de Dios. Se deben percibir los defectosen la dirección espiritual y no se debe actuar con blandura. La base para el examen de las realidades espirituales debe ser la rectitud y la sencillez. No se pueden emitir juicios precipitados; todo debe someterse a madura reflexión. Debe confiarse en Dios y en la protección de María Virgen.
Los tres espíritus que mueven al alma:
San Bernardo en “Sermo de discretione spirituum” indica queexisten seis espíritus diversos que pueden mover al alma en sus operaciones.
Espíritu divino, angélico, carnal, mundano y humano.
Señales del Espíritu de Dios
Deja impresiones favorables en el entendimiento porque Dios sólo inspira ideas verdaderas pues Él mismo es la verdad.
Dios no inspira cosas inútiles, infructuosas, impertinentes o frívolas.
Sus inspiraciones siempre traen paz alalma (cfr. Rom 15, 33; Flp 4,9; Jn 14,27; Gal 5,22).
Hace que se acepte con gozo y facilidad las recomendaciones del director
(Fil 4, 13; Jn 6, 45).
Convierte al alma en discreta, juiciosa, prudente, recta y ponderada. No se procede con ligereza, ni precipitaciones.
Llena el alma de pensamientos humildes (Mt 11,25). Se responde “ecce ancilla Domini, fiat secundum verbum tuum” (Lc 1, 38)....
Se le llama discreción de espíritus.
Se determina cuándo un alma está movida por el Espíritu de Dios o por el espíritu de las tinieblas o por la propia fantasía.
Es necesario este conocimiento para el desarrollo correcto de la dirección espiritual.
Dice Godínez en la “Práctica de la teología mística”:
“Espíritu es una propensión del alma a una cosa buena omala. Un hombre que tiene propensión a la oración se dirá que tiene espíritu de oración… Si tiende a pleitos y altercados se dirá que tiene espíritu de contradicción… El que se inclina a la oración, compostura, modestia, silencio y buen ejemplo y habla, trata, piensa de cosas espirituales, se dice varón espiritual”.
El ser humano siente propensión en sus potencias apetitivas, la voluntad y en susfacultades sensitivas.
Son mociones que parten de la libertad e impulsan a la acción. Pueden provenir de la propia espontaneidad o de la insinuación de Dios o del demonio.
El discernimiento de los espíritus consiste, pues, en averiguar en estos movimientos de la voluntad, sus propios principios (divinos o demoníacos).
Existen dos clases de discernimiento: adquirido e infuso.
Eldiscernimiento adquirido complementa la práctica de la dirección espiritual y puede desarrollarse por diversos medios.
El discernimiento infuso es una gracia (gratis dada) concedida por Dios a algunos santos (por ejemplo, Ana Catalina Emerick, Pío de Pietrelcina, Juan María Vianney).
Este tipo de discernimiento es infalible. Procede del Espíritu de Dios. Es carismático.
El discernimientoadquirido
Es una habilidad especial para examinar los principios y efectos de los movimientos del alma. Se deben contrastar con las reglas que ofrece la Escritura Santa y la Tradición cristiana. Debe dictaminarse si tales movimientos vienen del Espíritu de Dios, del espíritu de las tinieblas o de la propia imaginación extraviada.
Estos son los medios para alcanzar este arte divino:
La oración:Es el más importante y fundamental. Se debe solicitar a Dios los caminos de santificación de determinada alma. A esta solicitud responde Dios con el auxilio de la Divina Providencia que nos permite desempeñar nuestros deberes y obligaciones.
El estudio:
Es preciso conocer los datos que nos aportan la Sagrada Escritura, los Santos Padres, los teólogos y maestros de la vida espiritual.
Laexperiencia propia:
Como arte eminentemente práctico se impone la experiencia personal. Debe acostumbrarse a recibir la luz divina en la oración, en el trato íntimo con Dios.
La remoción de los obstáculos:
Debe suprimirse el espíritu de autosuficiencia que lleva a decidir por causa propia sin consultar jamás. Los espíritus soberbios pierden las gracias de Dios. Se deben percibir los defectosen la dirección espiritual y no se debe actuar con blandura. La base para el examen de las realidades espirituales debe ser la rectitud y la sencillez. No se pueden emitir juicios precipitados; todo debe someterse a madura reflexión. Debe confiarse en Dios y en la protección de María Virgen.
Los tres espíritus que mueven al alma:
San Bernardo en “Sermo de discretione spirituum” indica queexisten seis espíritus diversos que pueden mover al alma en sus operaciones.
Espíritu divino, angélico, carnal, mundano y humano.
Señales del Espíritu de Dios
Deja impresiones favorables en el entendimiento porque Dios sólo inspira ideas verdaderas pues Él mismo es la verdad.
Dios no inspira cosas inútiles, infructuosas, impertinentes o frívolas.
Sus inspiraciones siempre traen paz alalma (cfr. Rom 15, 33; Flp 4,9; Jn 14,27; Gal 5,22).
Hace que se acepte con gozo y facilidad las recomendaciones del director
(Fil 4, 13; Jn 6, 45).
Convierte al alma en discreta, juiciosa, prudente, recta y ponderada. No se procede con ligereza, ni precipitaciones.
Llena el alma de pensamientos humildes (Mt 11,25). Se responde “ecce ancilla Domini, fiat secundum verbum tuum” (Lc 1, 38)....
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