economía política

Capítulo II. Cómo nació el capitalismo.
Dobb, Maurice.

Capitalismo, crecimiento económico
y subdesarrollo.
Ed. Oikos - Tau.
España, 1975. Págs. 25 -- 31.

II
COMO NACIÓ EL CAPITALISMO
Además del capitalismo, han existido otras formas de
sociedades clasistas, en las que la clase dominante
vivía
del excedente de trabajo o del producto excedente de los
que trabajaban:
especialmentela esclavitud y el feudalismo. Creo que serían poquísimos, incluso entre los economistas, los que se atreverían a negar que los propietarios
de los esclavos se apropiaban del excedente de trabajo de
.

sus esclavos por encima del costo de mantenimiento;

o

que se podría dar un significado económico importél,nte,
dejando de lado los matices morales, a la afirmación de
que el señor delmedioevo explotaba a sus siervos 'sustrayéndoles una parte de su producto o tiempo de trabajo.
Verdaderamente
resulta difícil hallar cómo se podría se,.
ñalar de una fQrma realista la esencia económica de estos
sistemas sin una caracterización
de este tipo. Del mismo
modo, estos mismos economistas o, al menos, muchos de
ellos, negarían obstinadamente
que puedan aplicarse proposicionesanálogas al capitalismo, meramente
porque el
trábajador no tiene ninguna compulsión legal que le haga~
ceder su excedente de trabajo a un patrón, siendo la co~
ción . ejercida sobre él, en este sistema, puramente
eco,
nOffilca.
El proceso a través del cual se ha desarrollado
el capitalismo a partir de una forma anterior de sociedad clasista (el feudalismo medieval), y la transformación
deltrabajo servil del modo de producción
previo en trabajo
asalariado, ha sido largo y complejo. La forma exacta, y
los estadios de transición de este desarrollo, han sido objeto de grandes controversias,
en las que, aquí, no podemos detenernos.
Las trayectorias
de transición no fueron
de ninguna forma de contornos explícitosy
claros, e implicaron cambios políticos, tanto en el contenido delas clases

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MAURICE

DOBB

como en la actuación estatq.1. Se ha discutido respecto a
los papeles respectivos que desempeñaron
en la decadel!cia del feudalismo, en diversos países, en primer lugar una
revolución política y económica «~de--arriba»
(por ejemplo, por los grandes comerciantés unidos a sectores de la
aristocracia terrateniente)
y, en segundo lugar, por una revolución«d~.de~-ahaJ.o» dirigida por pequeños capitalistas,
procedentes
de las filas de los pequeños productores
a la
sazón en rebeldía contra la explotación
feudal (así, el
contraste entre países como el Japón y Prusia, de una par-

te, y el

« camino

clásico de transición»

de Inglaterra,

por.

la otra) (1). Cualquiera que haya sido la fuerza disolvente
más importante
de lasociedal feudal, podemos distinguir
dos~tapas principales de transición.
En la primera de estas etapas, el pequeño productor
se aseguró la emancipación,
total o parcial, de las obligaciones feudales que le oprimían. En la segunda se le privó
de su acceso a los medios de producción (su pequeña parcela de tierra, su ganado, sus utensilios agrícolas o artesanales), haciéndole dependiente,
enconsecuencia, de un salario para su subsistencia. Este proceso, que Marx deno-'
minó «acumulación
primitiva»
(o «acumulación
originada»), signific6 la aparición del proletariado.
La esencia de
este proceso es siempre la misma, bien asumiendo la forma
de desahucio' directo (Gomo ocurrió con los cercamientos o
vallado de la tierra y la expulsión de los agricultores propietarios de l~ historiainglesa), o bien adoptando la forma
de empobrecimiento
y endeudamiento
que conducen al
final a la expropiación por deudas, o la de un aumento de
la población mayor del que puede sostener la tierra disponible. En las dos primeras de estas formas, la aparición del
proletariado
fue la cara opuesta a la concentración
de la
propiedad,
de la que hablamos en la última sección, formando ambas,...