Educar Para La Ciudadania Mons.Casaretto
Páginas: 15 (3563 palabras)
Publicado: 28 de febrero de 2013
Estimados Amigos:
Les agradezco mucho el hecho de invitarme a participar de este espacio de reflexión sobre educación y ciudadanía. La inquietud por la construcción de ciudadanía es un tema que se ha instalado hace varios años en la sociedad argentina. Después de tantas crisis, nos hemos topado con la siguiente evidencia: como sociedad no logramos concebirnos como ciudadanos,vale decir, sujetos de derechos y deberes, constructores de un proyecto común de país.
Cualquier definición que busquemos sobre ciudadano o ciudadanía nos va a indicar que un ciudadano es persona que forma parte de una comunidad política. La condición de miembro de dicha comunidad se conoce como ciudadanía, y conlleva una serie de deberes y una serie de derechos que cada ciudadanode respetar y hacer que se cumplan. García Canclini acota que ser ciudadanos no tiene que ver sólo con derechos reconocidos por las instituciones que nos rigen a los que nacemos en un mismo territorio, sino que guarda una estrecha relación con “las prácticas sociales y culturales que dan sentido de pertenencia”.[1]
La construcción de ciudadanía, tiene que ver con nuestro proyectocristiano de vivir en sociedad. El modelo social para un seguidor de Jesús está descripto en el capítulo 2 del libro de los Hechos de los Apóstoles: Pentecostés. Este acontecimiento en el cual hombres de distintas lenguas y culturas se comprenden en orden al armado de un proyecto común, que con palabras de Pablo VI describimos hoy como “Civilización del Amor”, es la contrapartida simbólica de otrorelato bíblico que se encuentra en Génesis 11: Babel. La construcción de la torre quiere manifestar la edificación de un proyecto social, en el que las personas se dan la espalda unas a otras y a Dios. El resultado es la incomunicación y la dispersión.
En efecto, el modelo social no es independiente del ideario cristiano, nuestra fe nos marca el camino para un fuerte compromiso conlos demás, con nosotros mismos y con Dios. De allí la relevancia cristiana del compromiso ciudadano.
En el documento sobre el bicentenario que escribimos los obispos en noviembre de 2008, expresábamos el deseo de avanzar en nuestra madurez como sociedad argentina:
“Alentar el paso de habitantes a ciudadanos responsables. El habitante hace uso de la Nación, busca beneficios ysólo exige derechos. El ciudadano construye la Nación, porque además de exigir sus derechos, cumple sus deberes[2]. Hay una carencia importante de participación de la ciudadanía como agente de transformación de la vida social, económica y política. Los argentinos hemos perdido el miedo a la defensa de nuestros derechos, pero la participación ciudadana es mucho más que eso. El verdadero ciudadanointenta cumplir todos los deberes derivados de la vida en sociedad.” (HB n°34)
Ser ciudadano entonces, es ser protagonista del desarrollo de la vida de la sociedad, e implica compromiso lúcido, vale decir, un doble momento: por un lado involucrarse voluntaria y libremente en un proyecto común y por otro lado saber hacer, saber cómo construir ese proyecto y qué pasos dar.En este proceso, la educación resulta fundamental y esto de dos modos principales. Para los sectores menos favorecidos, la educación es la única arma que a largo plazo puede garantizar la inclusión social, y para quienes se encuentran ya incluidos en el sistema, la educación debe presentar un “plus” que despierte la conciencia solidaria, que nos haga pasar del proyecto individual al proyectocomún, del “sálvese quien pueda” a la construcción de un futuro como Nación.
Para reflexionar sobre lo que acabo de decir, propongo tres temas que a continuación profundizaré:
1. Educar para la inclusión
2. Educar para la solidaridad
3. Una propuesta educativa integral
Educar para la inclusión
El...
Les agradezco mucho el hecho de invitarme a participar de este espacio de reflexión sobre educación y ciudadanía. La inquietud por la construcción de ciudadanía es un tema que se ha instalado hace varios años en la sociedad argentina. Después de tantas crisis, nos hemos topado con la siguiente evidencia: como sociedad no logramos concebirnos como ciudadanos,vale decir, sujetos de derechos y deberes, constructores de un proyecto común de país.
Cualquier definición que busquemos sobre ciudadano o ciudadanía nos va a indicar que un ciudadano es persona que forma parte de una comunidad política. La condición de miembro de dicha comunidad se conoce como ciudadanía, y conlleva una serie de deberes y una serie de derechos que cada ciudadanode respetar y hacer que se cumplan. García Canclini acota que ser ciudadanos no tiene que ver sólo con derechos reconocidos por las instituciones que nos rigen a los que nacemos en un mismo territorio, sino que guarda una estrecha relación con “las prácticas sociales y culturales que dan sentido de pertenencia”.[1]
La construcción de ciudadanía, tiene que ver con nuestro proyectocristiano de vivir en sociedad. El modelo social para un seguidor de Jesús está descripto en el capítulo 2 del libro de los Hechos de los Apóstoles: Pentecostés. Este acontecimiento en el cual hombres de distintas lenguas y culturas se comprenden en orden al armado de un proyecto común, que con palabras de Pablo VI describimos hoy como “Civilización del Amor”, es la contrapartida simbólica de otrorelato bíblico que se encuentra en Génesis 11: Babel. La construcción de la torre quiere manifestar la edificación de un proyecto social, en el que las personas se dan la espalda unas a otras y a Dios. El resultado es la incomunicación y la dispersión.
En efecto, el modelo social no es independiente del ideario cristiano, nuestra fe nos marca el camino para un fuerte compromiso conlos demás, con nosotros mismos y con Dios. De allí la relevancia cristiana del compromiso ciudadano.
En el documento sobre el bicentenario que escribimos los obispos en noviembre de 2008, expresábamos el deseo de avanzar en nuestra madurez como sociedad argentina:
“Alentar el paso de habitantes a ciudadanos responsables. El habitante hace uso de la Nación, busca beneficios ysólo exige derechos. El ciudadano construye la Nación, porque además de exigir sus derechos, cumple sus deberes[2]. Hay una carencia importante de participación de la ciudadanía como agente de transformación de la vida social, económica y política. Los argentinos hemos perdido el miedo a la defensa de nuestros derechos, pero la participación ciudadana es mucho más que eso. El verdadero ciudadanointenta cumplir todos los deberes derivados de la vida en sociedad.” (HB n°34)
Ser ciudadano entonces, es ser protagonista del desarrollo de la vida de la sociedad, e implica compromiso lúcido, vale decir, un doble momento: por un lado involucrarse voluntaria y libremente en un proyecto común y por otro lado saber hacer, saber cómo construir ese proyecto y qué pasos dar.En este proceso, la educación resulta fundamental y esto de dos modos principales. Para los sectores menos favorecidos, la educación es la única arma que a largo plazo puede garantizar la inclusión social, y para quienes se encuentran ya incluidos en el sistema, la educación debe presentar un “plus” que despierte la conciencia solidaria, que nos haga pasar del proyecto individual al proyectocomún, del “sálvese quien pueda” a la construcción de un futuro como Nación.
Para reflexionar sobre lo que acabo de decir, propongo tres temas que a continuación profundizaré:
1. Educar para la inclusión
2. Educar para la solidaridad
3. Una propuesta educativa integral
Educar para la inclusión
El...
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