El Chantaje Emocional: Destrucción lenta y masiva.

Destrucción lenta y masiva: El chantaje emocional.
Todos en determinado momento de nuestra vida hemos pasado por alguna forma de violencia psicológica, que no es más que un conjunto de comportamientos que se manifiestan de forma consciente o inconsciente por nuestros familiares, amigos, parejas, jefes, profesores o demás personas con las que estamos en nuestro entorno; puede ser en forma depalabras hirientes, descalificaciones, humillaciones, gritos, insultos o chantajes.
Todos somos vulnerables al chantaje puesto que se nos puede presentar de diversas maneras; los chantajistas pueden ser unos agresivos y otros pasivos, otros más pueden ser directos o indirectos; pero en lo que todos coinciden es que conocen nuestros puntos débiles y saben por dónde atacarnos: por el miedo, la culpao la obligación. El miedo a las pérdidas, a los cambios o a ser rechazados, son motivos válidos para una persona en convertirse tanto en chantajista, como en chantajeado. Tanto uno como el otro son las dos caras de una misma moneda. Los miedos se basan de sentimientos de culpa, angustia o rechazo, en otros casos se debe a que perdemos autoestima y tenemos sentimientos de competencia e inseguridad.Los que somos chantajeados pagamos un precio muy caro cuando permitimos que esto suceda. Los comentarios y actitudes de nuestro chantajeador nos hacen sentir desequilibrados, avergonzados y culpables. Nosotros sabemos que es necesario modificar la situación, juramos que los haremos, pero muchas veces fracasamos al ser una y otra vez burlados y manipulados, como si se tratara de in círculovicioso. Cada vez que cada uno de nosotros nos rendimos al chantaje del otro, vamos acumulando enojo contra nosotros mismos, y es así como perdemos la noción de integridad, dañan nuestra confianza y su autoconfianza para la capacidad de resolver algo. Los chantajistas construyen de manera muy ingeniosa una estrategia consciente e inconscientemente en base a la información que nosotros mismos les damos,pues observan nuestros temores y saben que es de lo que huimos.
Por el otro lado de la situación, nuestro chantajista tiene un miedo tan intenso de no poder obtener lo que quiere de nosotros que sólo es capaz de centrarse en el resultado deseado, lo cual le imposibilita apartar su mirada del objetivo y percibir de qué manera su forma de actuar nos afecta y daña. Entonces lo que sucederá es quetoda la información sobre nuestros sentimientos, y que nosotros mismos les proporcionamos se convierte en una herramienta vital para llevar a cabo su plan en nuestra contra.
Todos los chantajistas focalizan su atención en sus propias necesidades, y la forma en que sus presiones afectan a los demás no es algo que les importe. Las características que nos hacen ser vulnerable al chantaje emocional sonla excesiva necesidad de aprobación, profundo miedo al enojo y la ira de quienes la rodean, gran necesidad de paz, sea cual sea su precio, tendencia a asumir demasiada responsabilidad por la vida de los demás, inseguridad con respecto al valor y capacidad personal, incapacidad de poner límites, escasos recursos de afrontamiento.
Estos manipuladores de nuestros sentimientos ponen en juego lasiguiente estrategia: dan mucho (cariño, por ejemplo) y lo dan de forma aparentemente desinteresada, pero, en realidad, buscan incrementar su autoestima, controlar nuestra conducta (provocando sentimientos negativos en nosotros: culpa, sobre todo) y obtener la atención, el afecto y la aprobación que de otra forma creen no poder conseguir.
Los resultados de un chantaje son diversos para ambos ladosdel juego: por un lado, el chantajista no cree en su capacidad para lograr el cariño de alguien de forma natural. Por eso fuerza la situación sobrecargando a su víctima de atenciones; por el otro lado al sentir que el chantajeado no responde a sus peticiones en la medida que él espera, acumula resentimiento, hostilidad y emociones negativas hacia sí mismo y hacia los demás. Justo entonces empezará...