el espiritu de la vida

El espíritu de la vida
1. Qué entiende nuestro autor por espiritualidad y por vitalidad?
«Espiritualidad» significa literal­ mente una vida en el Espíritu de Dios y una relación vital con este Espíritu.
Nosotros hemos pasado de la vitalidad de una vida creativa que viene de Dios, a la espiritualidad de una vida espiritualizada en Dios.
La palabra «espiritualidad» evoca en nosotros no sólouna historia lingüística, sino también figuras visibles y formas de vida.
La espiritualidad espiritual se sitúa por encima de la sensibilidad camal: aquélla es interior, ésta exterior; aquélla profunda, ésta superficial; aquélla reflexiva, ésta irreflexiva...
El cuerpo enfermo, frágil y mortal se convierte en «templo del Espíritu santo». «El cuerpo per­ tenece al Señor y el Señor pertenece alcuerpo», predicaba Pablo (1 Cor 6, 13).
El «aliento vital» (élan vital) (H. Bergson) hace que la vida cree desde sí misma. La vida que quiere vivir es inocente.
Algunos teólogos también han entendido así el vitalismo. En su «Etica», Dietrich Bonhoeffer recupera la categoría de lo natural. «Vida natural es vida con configuración propia. Lo natural es una forma inherente a la vida misma y al serviciode ella»3. Más aún, rechaza tanto el mecanicismo, que relativiza la vida como medio para un fin, como el vitalismo, que absolutiza la vida como fin en sí misma, entiende la vida natural como equilibrio entre los dere­ chos y obligaciones de la vida, y considera teológicamente la vida a la vez como una meta en sí misma y como un medio ordenado al reino de Dios.
Tillich situar la verdaderavitalidad entre el fin en sí mismo y el medio para un fin, uniendo en contenidos significativos «el poder de la vida» con «la intencionalidad de la vida». «La vitalidad es el poder de trascenderse sin perderse». Lo cual le otorga la posibilidad de distinguir: «El vitalismo, entendido como separación entre lo vital y lo intencional, introduce necesariamente la barbarie como ideal de coraje». Por otraparte, la intelectualización de lo intencional conduce a la pérdida de la vitalidad. Vitalidad vacía de sentido, por una parte, e intelectualidad exangüe, por otra, parten en dos al ser humano.
La angustia por la pérdida de sentido de la vida real es lo que lleva al hombre moderno a recurrir a medios que potencien la vitalidad. Así pues, no sólo hay que proteger la vitalidad que surge del amor a lavida contra su entumecimiento en las rutinas de la sociedad tecnológica, sino también contra el culto a la salud, tan propio de la moderna sociedad del rendimiento, y que tantas enfermedades procura al hombre.


2. ¿Cuáles son las distintas acepciones de la categoría Carne en San Pablo?
Pablo es apocalíptico en su antropología y antropólogo en su apocalíptica. Parte del conflicto universalentre el eón venidero de la vida y de la justicia y el eón pasajero del pecado y de la muer­ te, pero lo describe sobre todo antropológicamente como conflicto entre el «espíritu» y la «carne» en el ser humano.
«Carne» tiene para Pablo, desde distintas perspectivas, significados diferentes:
a) Es el ámbito del mundo creado. Es finita, frágil y caduca. «Toda carne» puede significar «cada uno» ytambién «todo viviente» que quiere vivir y sin embargo debe morir. Frente a la eternidad de Dios, «carne» es el mundo finito y caduco. Quien se entrega a la carne, es abandonado por Dios y, como aquella desaparece, desaparece también quien en ella confía. En este sentido, «carne» equivale a «cosmos», pues el hombre es una parte de este mundo caduco. Lo que experimenta en sí mismo, lo experimenta tambiénen otros seres vivientes. Igual que la criatura terrena, los hombres no son nada (Salmo 90). «Carne» es un concepto cosmológico y también antropológico.
b) Es el ámbito de la edad del mundo que pasa. Cuando Pablo utiliza la expresión (en la carne), contrapone «carne» y vida (en espíritu) y habla apocalípticamente. La vida en la carne es la vida falsa, malograda, la vida que no puede vivir y...