El estado de derecho (en minúsculas)

El estado de derecho (con minúsculas)

En tiempos pasados, LA RAZÓN (que con sus contenidos siembra tintes de ironía con su denominación social) publicaba un chiste en el que, ante el fallo delTribunal Superior de Justicia de Valencia, que no veía delito en lo imputado a Camps, sacaba pecho y presentaba a este último como calumniado por lo del “cohecho impropio” (cada vez me parecen másjilipollas los aspectos concernientes a la aplicación de la Ley y sus mecanismos).

A pesar de ello el Estado de Derecho prevalece y se sustenta, aunque con ciertos chirridos en su andamiaje ymanchurrones en sus revestimientos que nos hacen siempre preguntarnos si las normas funcionan, o están para que el más listo de la clase las interprete mejor y saque ventaja (a pesar de presentar hechosinculpatorios), eterna discusión con mi amigo abogado (pronúnciese como lo ejecutaba el doblador de Robert de Niro en el Cabo del Miedo):

- ¡Qué bien he defendido a mi defendido! (-valga laredundancia…-).
- O sea, que has engañado al juez, al Estado de Derecho, a la igualdad de los ciudadanos.
- La ley es interpretable y la decisión es tomada por una persona mu’ lista y estudia’. Son las reglas deljuego. (Pues hay veces que te dan ganas de c… en ellas).

Mi mente se revela y al final el recuerdo me transporta a los partidos de “furbol” en la plaza, en el que no había árbitro, y los “orsais”estaban clarísimos (alguno ni sabíamos lo que era), y las piedras y/o jerseys se transformaban durante tres horas seguidas en robustos postes que debía sustentar un larguero imaginario que delimitabaperfectamente, y digo perfectamente, qué era gol y qué no lo era (y los tiros dudosos sonaban metálicos, fueses atacante o defensor, al unísono en circuito cerrado en nuestras mentes), y en el que elrival era el enemigo acérrimo (odio eterno), y a pesar de ello las únicas expulsiones las determinaban las madres cuando llamaban a los Kun, Ronaldo, Messi y demás a merendar o cenar.

Otro que...