El Mayor Regalo Que Puedo Darle A La Iglesia Es Mi Santidad
Un pastorno puede conducir a su congregación a las profundidades de Cristo si él mismo no lo ha experimentado primeramente.
¿Cuál es el resultado de una iglesia que tienesorprendentes programas, brillante liderazgo, donde ante espectaculares presentaciones los congregantes no se mueven de sus sillas, y donde se cuenta con lo último en tecnologíae instalaciones, pero en su esencia no tienen visión de cómo ser un pueblo santo? ¿Qué buen fruto puede provenir de conferencistas que logran atraer la atención de suaudiencia a través de eventos de entretenimiento, buena música y conciertos, si éstos no son hombres que desean quebrantarse, y con reverencia y humildad, reconocer loalejados que su congregación y ellos mismo están del Dios santo y maravilloso?
Nuestras iglesias están a menudo llenas de frivolidad y lo sabemos, pero esto no cambia porquelos líderes lo toleran en lugar de lamentarse por ello. La situación en la iglesia es simplemente un reflejo de la realidad que está en el corazón del pastor. La luz quebrota de una vasija rota sobrepasa, eclipsa la luminosidad producida por miles de programas religiosos de entretenimiento. Pablo dijo, ustedes tienen muchos tutores, peropocos padres. Hoy podría haber dicho: ustedes tienen muchos expertos en la iglesia, pero pocos hombres santos.
Oremos por una revolución de santidad violenta!!!
Regístrate para leer el documento completo.