El Poder de la Palabra

EL PODER DE LA PALABRA
¿Oramos? ¿Sabemos cómo orar?
¿Seguimos nuestras tradiciones u obedecemos patrones naturales de
conducta Universal?

Hacía tiempo que no me sentaba a leer un buen libro, yasea por
las múltiples ocupaciones y pre-ocupaciones mundanos como padre de familia. Lo
cierto es que hoy día de reyes, 6 de enero del 2013, tomé un libro después de
desechar otras a medio camino.En esta ocasión leo "La Undécima Revelación" de
James Redfield. Apenas en el primer capítulo me encontré con un mensaje muy
importante y que quisiera compartir con todos ya que creo que tenemos latendencia a olvidar y perder el enfoque de nuestros propósitos al caer en el letargo
del aburrimiento cotidiano, generalmente por inducciones pseudo-tecnológicas.
Hago un paréntesis en este puntopara enfatizar que pienso se debe desarrollar y
conversar mucho sobre este tema porque siento que estamos descuidando el
balance natural que debe existir entre este punto (tecnología) y el estado delser.
Es un tema extenso pero que debe ser abordado con madurez y responsabilidad
ya que somos las generaciones de relevo, quienes vivimos ambas transiciones y
tenemos la responsabilidad de pasarlesconocimientos relevantes de nuestros
antepasados directos o indirectos a nuestros hijos.
Volviendo al libro, el punto que se recalca en este capítulo es sobre la fe hacia la
oración y la forma enque tradicionalmente nos han inculcado nuestras respectivas
religiones, sembrando patrones de conducta absolutamente dependientes hacia
algo superior, cuando en realidad no hemos concientizado quesomos parte
fundamental de esa energía superior. Específicamente mencionaba un personaje
sobre el descubrimiento de científicos acerca de la influencia de la oración en
pacientes, conscientes o noque un colectivo oraba por ellos, concluyendo que de
una u otra manera enviamos nuestras respectivas intenciones o energías a seres
queridos, afectando o alterando sus energías de alguna forma....