El Pueblo

El pueblo

Un grupo de jóvenes trabajadores de una compañía de video filmaciones se dirigía hacia Torreón por la autopista libre. Su vehículo era un Cross Fox rojo. Dentro iban el conductor, su copiloto, y dos personas más atrás, así como algo del equipo que iban a usar.

Cerca de las siete de la noche su vehículo comenzó a fallar. Los indicadores del auto se apagaban y prendían como locoshasta que de pronto el motor dejó de funcionar. Los jóvenes como pudieron lo sacaron de la carretera para evitar un accidente y se dispusieron a buscar qué era lo que había pasado. Quizá era algún detalle con la batería, pero el auto lo habían checado antes de emprender el viaje y todo andaba bien. Mientras la confusión se incrementaba también se consumían los minutos y eso se traducía en estarsolos en medio de la nada y cubiertos por las sombras durante un largo rato.

Después de no encontrar quien les brindase una mano se resguardaron en el vehículo y se propusieron dormir un poco. A eso de las once de la noche todos se despertaron alarmados por el grito de uno de sus compañeros que se encontraba en el asiento trasero. El joven de apenas veintitrés años de edad despertó sudando frío ycon los ojos desorbitados. Al cuestionarle qué le había pasado su compañero les refirió que había soñado que se despertaba y se acomodaba en su asiento junto a la ventana, detrás del copiloto, pero que de pronto de reojo vio que algo se movía afuera. Volteo para divisar que era aquello y para su sorpresa lo que vio fue un cadáver carente de pelo, con una piel grisácea sucia y resquebrajada así comounos ojos completamente blancos, que con su mano podrida y carcomida tocaba el vidrió del auto mientras acercaba lentamente el rostro consumido por los gusanos.

Los amigos del joven no le dieron crédito al relato como cualquier otro habría hecho y comenzaron a burlarse de su amigo, sin embargo, en medio de las risas voltearon a ver al joven frustrado quien ya se encontraba bien acomodado en suasiento y sus rostros palidecieron. Junto a aquel que había tenido la pesadilla, en el cristal de su ventana estaba claramente marcada la mano derecha de una persona.

Tanto era su asombro que no se dieron cuenta cuando un tráiler se detuvo a unos metros detrás de ellos. El conductor de la pesada unidad descendió y se dirigió hasta el auto. Al acercarse lo suficiente observó por el vidriótrasero y golpeo el cristal fuertemente con su mano derecha. Los jóvenes brincaron en sus asientos por la sorpresa e instantáneamente salieron del trance en el que se encontraban.

Después de una amena charla con el trailero decidieron tomar su consejo de enviar a dos de ellos al pueblo cercano para pedir ayuda mientras los demás se quedaban en el vehículo por si la ayuda llegaba antes. Los jóvenesJuan, el copiloto, y Andrés, el joven sentado junto a aquel que había tenido aquel sueño, se subían al enorme tráiler mientras el conductor lo encendía. En cuestión de minutos ya estaban en movimiento. Y fue así que cerca de las doce y media de la noche se bajaron del tráiler con celulares en mano y siguieron las indicaciones proporcionadas por el conductor al pie de la letra.

Luego de veinte otreinta minutos de caminar por el desierto en medio del frío y la noche pudieron ver a lo lejos en un valle las siluetas de las casas de un pueblo bajo la misteriosa luz de la luna. Por fin una leve sensación de alivio recorrió los cuerpos de los jóvenes mientras continuaban su camino por el desierto sin saber qué les podría estar esperando en aquel fantasmagórico lugar.
Capítulo 2

Habíapasado alrededor de media hora desde que el trailero dejara a aquellos jóvenes en el paso que llevaba a un pequeño pueblo para que les brindasen apoyo ya que tenían su auto averiado. Su mente estaba ocupada con aquel evento cuando observa a unos cuantos metros al frente como un sujeto en medio de la noche sale de las sombras e intenta cruzar velozmente la carretera. El conductor pisó a fondo el freno...