El Sentido de la Muerte para el Mexicano

El Sentido de la Muerte para el Mexicano
1. Matriz cultural indígena
2. Raíz hispano-católica
3. Corriente racionalista-positivista
4. Globalización y crisis cultural
5. Comunión cultural
1. Matriz cultural indígena
1. No hay persona en la cultura indígena; es un aporte típico del cristianismo, que por definición se interesa en la libertad de cada uno, en su salvación; para ellos losindividuos tienen valor en relación al clan y a la familia, donde desempeñan una función definida, que depende también del estrado social; los seres humanos están en función de los dioses y de los reyes. Por el contrario, en las universidades españolas, particularmente en Salamanca, la valoración de la persona hace surgir un debate intenso sobre el dominio español en América; su principalrepresentante es Francisco de Vitoria, protagonista del primer debate intelectual sobre los derechos humanos.
2. Sin embargo, nuestros antepasados indígenas han conocido la trascendencia; la vida después de la vida y los dioses; los muertos van a Mictlán. Las culturas más desarrolladas han llegado a descubrir un único Ser Supremo, pero no lo descubren como persona.
3. Según el mito del quinto sol, el hombreproviene del sacrificio de la divinidad; Quetzalcóatl creó a los macehuales a partir de los huesos molidos traídos de Mictlán, polvo que amasó con la sangre de su miembro; por eso son los hijos de la penitencia, y se le deben sacrificio. De hecho los anteriores hombres habían sido destruidos porque no daban culto a los dioses.
Esa es la justificación de los sacrificios humanos, práctica quediezmaba a los enemigos de los aztecas, como se lee en la Segunda Carta de Relación (1520) de Hernán Cortés () “dijeron que querían ser vasallos de vuestra majestad y mis amigos, y que me rogaban que los defendiese de aquel gran señor que los tenía por fuerza y tiranía, y que les tomaba sus hijos para los matar y sacrificar a sus ídolos”.
4. Sus dioses eran terribles. La religión indígena tiene muchode terror y miedo, tal como todavía hoy proceden sus seguidores, llamados brujos. Por ejemplo, Coatlique, la “Señora de la Falda de Serpientes”, diosa Tierra de la vida y la muerte en la mitología azteca, tenía una apariencia terrible: una mujer con falda de serpientes, un collar de corazones de las víctimas, senos flácidos y garras afiladas.
5. Sin embargo, así como los sabios del Anáhuachabían alcanzado una comprensión superior de la Divinidad, también la tuvieron de la vida y de la muerte. En el poema Yo lo Pregunto de Netzahualcóyotl, leemos: “Yo Nezahualcóyotl lo pregunto: / ¿Acaso de veras se vive con raíz en la tierra? / Nada es para siempre en la tierra: / Sólo un poco aquí. / Aunque sea de jade se quiebra, / Aunque sea de oro se rompe, / Aunque sea plumaje de quetzal sedesgarra. / No para siempre en la tierra: / Sólo un poco aquí”.
Esto explica la postura de los sabios aztecas, consignada por fray Bernardino de Sahagún en los diálogos de los doce franciscanos con los tlamatinime indígenas (1524); éstos declararon el absurdo de sus vidas y les dijeron, turbados por la derrota y heridos por el rechazo de sus dioses: “Vosotros dijisteis que nosotros no conocemos al Señordel cerca y del junto, a aquel de quien son los cielos y la tierra. Dijisteis que no eran verdaderos nuestros dioses”. Es el henoteísmo. Añadían: “Somos gente vulgar, somos perecederos, somos mortales, déjennos pues morir, déjennos ya perecer, puesto que ya nuestros dioses han muerto”.
Y hablaban de un lugar donde los dioses “Ellos mismos son ricos, son felices, poseen cosas, de manera quesiempre y por siempre, las cosas están germinando y verdean en su casa… allá donde de algún modo se existe, en el lugar de Tlalocan. Nunca hay allí hambre, no hay enfermedad, no hay pobreza. Ellos dan a la gente el valor y el mando…” Juan Diego, según el Nican Mopohua, al oír el canto de aves preciosas, signo de la belleza y de Dios mismo, se pregunta si está en el lugar del que hablaron sus...