El Trauma

Colette Soler
EL TRAUMA
Conferencia pronunciada en el Hospital Álvarez , el 15 de diciembre de 1998

El discurso sobre el trauma empezó aproximadamente a principios del siglo, más o menos de manera contemporánea a la aparición del psicoanálisis, y en la Europa de la Primera Guerra Mundial. Por ejemplo, la noción de neurosis de espanto (névrose de effroi) - sobre la cual Freud discutió en sutiempo, aunque el espanto puede ser producido por muchas cosas, no sólo por la guerra - ; fue justamente en la guerra que la neurosis traumática como tal, tuvo ocasión de ser planteada.
Hoy la reflexión sobre el trauma está en todas partes, no solo en el discurso de la psiquiatría, sino también en el discurso que refiere a las políticas de salud mental y en el nivel de lo jurídico, cuando setrata del problema de la indemnización de los traumatizados, o cuando se trata de la responsabilidad respecto de las catástrofes.
Hay todo un discurso sobre el punto, y curiosamente, en el campo del psicoanálisis ahora no se habla mucho del trauma; se habla más de fantasma y síntoma, que del trauma. Se evidencia enseguida una cierta oposición, porque cuando se habla del fantasma ‑inclusive delsíntoma- la implicación subjetiva está presente. Y en el trauma uno piensa, mas bien, que la responsabilidad subjetiva no está implicada.
Es verdad que el campo psi, se puede decir­ “de los traumas”, excede en mucho el campo del psicoanálisis. Finalmente, cuando definimos el trauma hablamos de evento traumático; cuando hay efracción de un real que cae bajo el individuo..., un real imposible deanticipar, y a la vez imposible de evitar. Un real, por eso lo llamamos real además, que parece excluir la incidencia del inconsciente, o del deseo propio del sujeto que padece el trauma.
Entonces hablamos del trauma cuando hay una efracción del dolor, del sufrimiento, del espanto, por vía de un encuentro inesperado.
Las bibliografías sobre los traumas son muy abundantes. Hay una cantidad deestudios sobre la guerra: del 'l4 al '18, en Europa; sobre la última Guerra entre el '39 y el '45, siempre en Europa; después la Guerra de Vietnam. Cada una con su cúmulo de bibliografía respecto de los traumatizados. Además la Guerra del Golfo, la Guerra árabe‑israelí y otras.
Pero también están las víctimas del terrorismo, las víctimas de los atentados sexuales, siempre mas numerosos, y las víctimasde las catástrofes naturales, las que las llaman "naturales".
Aquí vemos, que quizás la intrusión del real traumático no es homogénea.
Hay de un lado los traumas de la guerra y del sexo, que implican al Otro, que implican la voluntad de goce del Otro de una manera o de otra.
Pero cuando se trata de las catástrofes "naturales", de las inundaciones, de los terremotos, de las erupcionesvolcánicas, esto parece lo más real de lo real, sin la incidencia del Otro.
Y entre los dos tipos de causación del trauma, hay otras no tan naturales, como por ejemplo la de Chernobil; catástrofe natural, pero a la vez muy humana.
Lo que me llama la atención de la modernidad es que en nuestra sociedad, en un nivel bastante colectivo, se fomenta un Otro reparador frente a los traumas. Es decir que ennombre de la solidaridad se fabrica un Otro que construye el discurso sobre el trauma y sus soluciones, y por consiguiente las ayudas necesarias. ¡Y es interesante como fenómeno!. Porque en una sociedad en la cual, suponemos la muerte de Dios fue registrada; en un tiempo donde no tenemos mas el sentido de la tragedia, de la tragedia antigua; en un tiempo en el cual no creemos más en el destino...;tenemos al contrario, el sentimiento de la contingencia.
Sin embargo el Otro del discurso, a pesar de ser fragmentado, inconsistente, logra construir un Otro de sustitución, que es el Otro de la solidaridad. Y eso es interesante porque nos indica que cada tiempo y cada cultura inventa las figuras del Otro.
Ahora, nos podemos preguntar porqué tenemos tantos traumatismos, es el punto....