El uso excesivo de los spots y sus efectos adversos para la participación política y la reflexión del voto

Se ha conferido a los partidos políticos en México el derecho al uso de manera permanente
de los medios de comunicación social. Los precandidatos y candidatos a cargos de elección
popular acceden a la radio y la televisión a través del tiempo que se les otorga como
prerrogativa a los partidos, en los términos y condiciones que disponga el marco jurídico
aplicable.
Como formato empleado porlos partidos políticos, los mensajes transmitidos por spots
representan el modo de utilizar la prerrogativa de acceso a los medios de comunicación.
Después de las elecciones federales de 2009 y 2012, más allá del controvertido tema de la
gratuidad de los spots, se plantea la pregunta si la mayor presencia de los partidos y candidatos
en la radio y la televisión tiene un efecto adverso algenerar hartazgo en la ciudadanía.
Priva en la actualidad una condena hacia los spots político-electorales por considerarse la
causa de la baja calidad en la política, así como de la falta de reflexión en el ejercicio del
sufragio. Se cuestiona su forma de operar y se discute por qué se han vuelto tan importantes
en las democracias contemporáneas.
Asociada a lo emocional, a la manipulación y alengaño, la imagen visual explotada en
los spots político-electorales es cuestionada de manera severa. Se encuentran advertencias
recurrentes acerca de la primacía de la imagen y la desaparición de la discusión argumentativa
que debía prevalecer en el campo de lo político.
Sin dejar de reconocer la importancia estratégica de este formato, en el texto se sugiere
una modificación pertinente; en lanormativa electoral aplicable debe plantearse la posibilidad
de contemplar otro formato de comunicación que fomente la participación política del
electorado y propicie el debate de ideas y programas entre los actores políticos. Inadecuado
el uso desmedido de spots, se propone considerar la posibilidad de complementarlos con
otras alternativas que propicien la reflexión del sufragio. Sin llegara retirarlos, es prudente estimar el empleo de otro tipo de anuncios con mayor duración y contenido informativo.

Introducción
Sartori coincide con la doctrina clásica cuando sostiene que la democracia puede
definirse como un gobierno de opinión. También ha dicho que la televisión es una
importante fuente generadora de opinión, el pueblo soberano “opina” sobre todo
de acuerdo con la formaen que la televisión muestra la realidad. Para Sartori la
cultura de la imagen rompe el delicado equilibrio entre pasión y racionalidad1.
En la emergente dinámica democrática que vive México varios fenómenos
han llamado la atención, uno de ellos es la aparición de la publicidad o propaganda
televisiva durante las competencias electorales, de forma particular la
denominada con el nombre despot. Bajo ciertos aspectos, puede afirmarse que
los medios de comunicación y, en particular, la televisión, condicionan el proceso
electoral tanto en la elección de los candidatos como en su modo de administrar
la disputa. La fuerza perturbadora de la imagen rompe el sistema de equilibrios y
retroacciones múltiples que a lo largo de casi dos siglos fueron conocidos mediante
el vocablo “opiniónpública”. En ese sentido, la televisión supera a los líderes
intermedios de opinión y anula la multiplicidad de “autoridades cognitivas”. Con
la televisión la autoridad reside en la imagen misma. La relación entre medios y
elecciones se ha vuelto relevante y, con mayor razón, en los procesos electorales.
Parece que hoy en día se presenta en la experiencia política un nuevo
desplazamiento que vade la acción al discurso y de éste a la imagen. La imagen
se ha convertido en la vía expositiva del discurso que precede a la acción política,
al grado que algunos estudiosos se preocupan de esta relación llamando la
atención sobre el poder de la imagen. Todo indica que el reino de las emociones
y las percepciones ha tomado lugar en la política, sacrificando a la verdad por el
impacto...