Ensayo intelectualismo pop

Actualmente llamamos competitividad a la capacidad de una organización de mantener ventajas que le permitan alcanzar, sostener y mejorar su posición en un entorno socioeconómico. Sin embargo este concepto se ha relegado con la idea de que la economía de un país se rige por el éxito de los mercados mundiales, idea que parece verse respaldada por personas “conocedoras” de la materia y que dan porhecho que el problema económico que enfrenta cualquier nación moderna es esencialmente el de competir en los mercados mundiales.

Es importante tener claro que un país no compite con otro de la misma manera en que lo hacen las empresas. Si una empresa no logra hacer frente a sus compromisos con los trabajadores, los proveedores y los acreedores, debe cerrar. Con los países no ocurre lo mismo, pueséstos no cierran, y no tienen una línea de flotación bien definida. El comercio internacional, a diferencia de la competencia entre las empresas por un mercado limitado, no corresponde a un flujo de suma cero en el que las ganancias de una nación representan las pérdidas de otra: es, en realidad, un juego de suma positiva. Los principales países industrializados, aunque venden productos quecompiten unos con otros, también constituyen entre si sus propios mercados de exportación principales y los propios proveedores de importaciones útiles para los otros.

La concepción de un mundo de suma cero y en el que se “gana o pierde” al comparar las economías líderes, los efectos de una mayor “competitividad” sobre el comercio, el empleo y los salarios, y las consecuencias sobre la economíaindustrializada de los avances del crecimiento económico de los países del Tercer Mundo hacen parte de los argumentos que convierten la competitividad en una teoría casi completamente sin fundamento. Uno podría suponer, ingenuamente, que el punto final de una economía nacional es simplemente su balanza comercial, que la competitividad se puede medir por la habilidad que tiene un país para vender en elextranjero más de lo que compra. A pesar de que el comercio mundial es más grande que nunca, los estándares de nacionales están determinados abrumadoramente por factores domésticos y no por la competencia en los mercados mundiales.

Sin embargo la gran pregunta es ¿Por qué se ha extendido tanto este término? Al entrar a analizar las razones nos encontramos con tres que se caen por su propio peso.La primera razón es que las imágenes competitivas son emocionantes y las emociones venden. La segunda es la idea de que las dificultades económicas recaen exclusivamente en el fracaso en la competencia internacional lo que hace que dichas dificultades parezcan más fáciles de resolver. Finalmente, muchos líderes mundiales han encontrado en la competitividad una buena manera de justificar decisionesdifíciles o simplemente para evitarlas.

Los mitos y realidades de la competitividad y a las falacias que se han venido desarrollando sobre el comercio internacional, tratan de explicar porque el definir el problema económico como uno de competencia internacional es tan atractivo para la gente, aunque cualquier obsesión con la competitividad no solo es equivocada sino peligrosa, desviando laspolíticas internas y amenazando el sistema económico internacional.

Mucha gente que sabe que la competitividad es en buena parte un concepto sin sentido ha estado dispuesta a utilizarla precisamente porque cree que puede aprovecharla al servicio de políticas buenas. Hace unos años esta era una esperanza razonable. En este momento, sin embargo, la obsesión con la competitividad ha llegado al punto enque ya ha comenzado a distorsionar peligrosamente las políticas económicas. Desafortunadamente, aquellos economistas que tenían aquella esperanza para beneficio de buenas políticas económicas han en cambio visto que su credibilidad ha sido apropiada a nombre de las malas ideas.

La competitividad aplicada a economías nacionales tiene tres grandes peligros. El Primero es que podría haber un...