Ergonomia
Después de la muerte de Jesús, sus apóstoles no ordenaron en ningún momento que se observase el sábado. Tampoco se incluyó como requisito cristiano ni en Hechos 15:28, 29 ni posteriormente. No instituyeron un nuevo sábado, un “día del Señor”. Aunque Jesús fue resucitado en el día queactualmente llamamos domingo, en ningún lugar indica la Biblia que deba conmemorarse este día de su resurrección como un “nuevo” sábado o algo semejante. Se han citado 1 Corintios 16:2 y Hechos 20:7 para apoyar la observancia del domingo como un sábado o día de descanso. Sin embargo, el primer texto meramente indica que Pablo dio instrucciones a los cristianos para que cada primer día de la semanapusiesen aparte en sus casas una cierta cantidad para sus hermanos necesitados de Jerusalén. No tenían que entregar el dinero en su lugar de reunión, sino guardarlo hasta la llegada de Pablo. En cuanto al segundo texto, era lógico que Pablo se reuniese con los hermanos de Troas el primer día de la semana, puesto que partía al día siguiente.
Lo antedicho deja claro que la observancia literal de días yaños sabáticos no formaba parte del cristianismo del primer siglo. No fue sino hasta 321 E.C. cuando Constantino decretó que el domingo (en latín: dies Solis, un título antiguo relacionado con la astrología y la adoración del Sol, no Sabbatum [sábado] o el dies Domini [día del Señor]) fuese un día de descanso para todos excepto para los agricultores.
Ajuste en el punto de vista
Jesucristo,quien de nacimiento perteneció a la nación de Israel, dijo a sus discípulos: “No piensen que vine a destruir la Ley o los Profetas. No vine a destruir, sino a cumplir”. (Mateo 5:17.) El apóstol Pablo escribió a los cristianos hebreos: “La Ley tiene una sombra de las buenas cosas por venir, pero no la sustancia misma de las cosas”. (Hebreos 10:1.) Si usted hubiera sido un hebreo convertido alcristianismo, ¿cómo habría entendido esos dichos? Algunos miembros de la congregación cristiana primitiva creían que los centenares de leyes que Dios había dado mediante Moisés, entre ellas los Diez Mandamientos, regían todavía. Pero ¿era correcto ese punto de vista?
Considere estas palabras de Pablo a unos judíos conversos al cristianismo en la provincia de Galacia: “Nosotros que somos judíos por...
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