estadio del espejo en lacan

El estadío del espejo y la constitución del yo:
Una articulación de Freud a Lacan.
Verónica C. Vega


Introducción:
Intentaré en estas páginas recorrer algunos conceptos freudianos a través de lo que Lacan teoriza en “El estadio del espejo…” . Me propongo simplemente recuperar ciertos conceptos de la obra de Freud para ver, cómo en el escrito mencionado, Lacan rescata la letra de Freud y a lavez, introduce la propia.

Sobre el final, quisiera dejar planteados algunos interrogantes que me surgieron a partir del texto del estadío del espejo, de la lectura del Seminario 4 de Lacan, en tanto podría ser posible pensar algunas cuestiones de los imperativos categóricos de la sociedad actual.

Si bien Lacan no es un teórico evolucionista, en el texto de 1949 se ocupa de lo que él llama poresta época “El estadío del espejo como formador de la función del yo…”, aunque luego en el Seminario 4, que trata sobre las relaciones de objeto deja en claro que “está lejos de ser un mero fenómeno que se produce en el desarrollo del niño. Ilustra la naturaleza conflictiva de la relación dual” (Lacan, 1956). Por lo tanto, no se trata de un hecho histórico -aunque lo delimite entre los 6 y los 18meses-, sino de una construcción estructural. Este momento propio del infans, está caracterizado por cierto malestar, al cual Lacan hace referencia cuando menciona el “dinamismo libidinal hasta entonces problemático” (p.100) o la “turbulencia de movimientos con que se experimenta a sí mismo” (p.101) y se correlaciona con un cuerpo aún no constituido como tal.



Freud: El yo y el deseo seconstituyen en relación a otro.
Antes de dar cuenta del atravesamiento por el estadio del espejo y de algunos de sus efectos, me permito recordar que, al igual que para Lacan, en Freud el yo no es una estructura innata sino que tiene que constituirse. Desde sus primeros trabajos, Freud (1895,1900) intenta formular un modelo de aparato psíquico y repara en el “apremio de la vida” (p.341),vulnerabilidad propia del bebé humano que hace indispensable la necesidad de contar con un “auxilio ajeno” (p.362) encargado de satisfacer las necesidades ligadas a la autoconservación. El llanto del bebé motivado por la tensión inicial se transforma en comunicación cuando obtiene una respuesta de otro que hace cesar dicha tensión. Esa respuesta es lo que Freud llama “acción específica” (p.341, 362) y provienede quien se depende, de un otro ajeno al yo. En el “Proyecto…” es posible advertir cómo Freud va articulando desvalimiento, dependencia y necesidad con el nacimiento del deseo en relación con otro, deseo que es consecuencia de la huella de la primera vivencia de satisfacción1.
Ese auxilio “ajeno” proviene de quien, a través de una “acción específica” funda una primera vivencia de satisfacción;hito que indica un nuevo estatuto: el primer yo psíquico (vale aclarar que el yo real primitivo no lo es en tanto funciona con el esquema del arco reflejo).
Lo que en Freud es aquél que sabe cuál es la acción específica, en Lacan aparece como el Gran Otro, aquel que supuestamente sabe y que tiene los significantes y la posibilidad misma para responder o no. Es gracias a la función materna,encarnada no necesariamente en la madre, que se funda un nuevo yo, regido por el principio de placer y al que Freud llama yo placer purificado. En este yo placer purificado, se establece un encuentro ideal, narcisista, ilusorio entre el bebé y la madre. El bebé así coincide con todo lo placentero y proyecta fuera de sí todo lo displacentero; de manera tal que el mundo externo le resulta hostil y elmundo interno es puro placer. Este punto diferencia a Freud de Lacan, quien introduce en este campo algo nuevo: el concepto de agresividad como algo que se da en el marco del narcisismo especular. Es decir, agresividad y enamoramiento son dos caras de una misma moneda en el estadio del espejo. La agresividad en la teoría de Lacan forma parte del narcisismo porque en tanto es dirigida hacia el...