Eutanacia Bioetica Y Bioderecho

¿CÓMO LA ENTENDEMOS?

En su significado etimológico, el término “eutanasia” no presenta ambigüedades, sustancialmente significa “buena muerte”. Pero hoy al hablar de eutanasia, ¿a qué nos estamos refiriendo exactamente? Por ejemplo, los que están a favor de ella pueden estar indicando con ese nombre, varias cosas:
✓ Una garantía, para sí y para los demás, respecto al riesgo de acabarsiendo víctimas del llamado “encarnizamiento terapéutico ’’(tratamiento extraordinario, del que nadie pude esperar ningún tipo de beneficio para el paciente), lo que significa que sólo serviría para prolongar la agonía de una muerte cargada de angustiosos sufrimientos.3
✓ Un seguro contra una muerte muy cargada de tecnología, entre aparatos sofisticados y rodeados exclusivamente por personasextrañas, pero, eso sí, pendientes de los datos aportados por los aparatos de monitoreo, pero no de la persona que se está muriendo y de sus profundas exigencias humanas: en definitiva una muerte en la soledad, desoladora.
✓ También es posible una muerte sin dolor, provocada voluntariamente, a petición propia, simplemente porque se desea escoger ese último momento o aplicada a una persona condenadaa morir tras un periodo más o menos largo de sufrimientos.
Si ponemos atención a estos tres significados, podemos encontrar diferencias profundas entre ellos. Los problemas del “encarnizamiento terapéutico” y de los límites del empleo de la tecnología de reanimación y cuidados intensivos, se plantean en el contexto de la lucha contra la muerte: Lo que se pretende es arrancar al paciente de unamuerte prematura y aquí el problema es el de los límites. Se trata de saber hasta dónde es lícito insistir en los intentos de salvación y dónde comienza el deber de suspenderlos, con el fin de que, ante una muerte que se presenta inevitable, el paciente sea ayudado a aceptarla rodeado del cariño de personas que lo aman y saber aliviar sus sentimientos. En resumidas cuentas, es evitar una lucha atoda costa contra la muerte, lucha desesperada y absurda, que acaba por hacer todavía más deprimente y angustiosa esa misma muerte.

Muy diferente e incluso contraria es tercera situación, que no es la lucha contra la muerte, sino que es la muerte deseada y provocada. Entonces al utilizar el mismo término para referirse a realidades contrarias entre sí nos puede producir confusión. Es más, sepudiere decir que la situación se agrava, para justificar la eutanasia, cuando se pone de moda el término de “derecho a una muerte digna”, avalada por el prestigio de algunos científicos, entre lo que se incluyen premios Nobel como Monod, Pauling y Thompson; entonces, con esta trágica realidad de la eutanasia parecería rodearse de una cortina de humo contemporáneamente luminosa que pone en evidencia aquien desee rechazarla y se le considera anticuado.
Sin duda en el derecho a vivir con dignidad se incluye el derecho a morir con dignidad, es decir, de manera adecuada á la dignidad del hombre. Lo insidioso del equívoco surge cuando se declara indigna del hombre toda muerte que haya sido precedida o acompañada de sufrimientos, por una creciente disminución de su capacidad física y psíquica,como lo que sucede a menudo en los ancianos enfermos y en todas las enfermedades graves e incurables, sabiendo que éstas son las limitantes de todo ser humano como persona, la muerte y el sufrimiento


DEFINICIONES

Más que una definición, en sentido riguroso es una descripción lo que nos presenta Concetti y esto porque no existe una definición aceptada por todos y que se imponga por sí misma;así que se entiende por eutanasia: La muerte indolora infligida a una persona humana, consciente o no, que sufre abundantemente a causa de enfermedades graves e incurables o por su condición de disminuido, sean estas dolencias congénitas o adquiridas, llevada a cabo de manera deliberada por el personal sanitario, o al menos con su ayuda, mediante fármacos o con la suspensión de curas vitales...