fantasmas chistosos
linan profundamente ante el rey).
Gualberto: ¿Undragón devasta el reino?
Filiberto: ¿O es que la fiera corrupia
devora gente de nuevo?
Gualberto: Contad para exterminarlos
Con la espada de Gualberto.
Filiberto: Y el hacha de Filiberto.
Rey: No. Nada de eso.
Sóloquiero que me deis
un poquito de dinero.
Gualberto: Mandadme conquistar Constantinopla o, si preferís, la Mongolia.
Os juré fidelidad y mi ser os pertenece, mas mis riquezas son mías,
las amo más que a mí vida.
Filiberto: Con el debido respeto,
igual que mi hermano pienso.
Y si queréis un consejo sin dudar os lo daré,
pues eso es gratis, señor. Majestad, debéis casaros.
Gualberto: La duquesa Federica,...
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