Henry Van De Velde Y La Casa Meissen

Henry van de Velde y la casa Meissen: ¿un encuentro desafortunado?

Mauricio Coitiño


Antecedentes y contexto histórico

A comienzos del siglo XVIII, Augusto el Fuerte, Príncipe Elector de Sajonia y rey de Polonia encomienda a Johann Friedrich Böttger y equipo en Meissen el proyecto de descubrir el secreto de la fabricación de la porcelana. El 23 de enero de 1710, la cancillería a de lacorte de Sajonia proclama en un “muy alto decreto” la invención de la porcelana y la fundación de una fábrica a tal efecto. En junio de ese año se establece la Fábrica de Porcelana Meissen en el castillo de Albrechtsburg.
Durante el siglo XVIII los productos de la fábrica se hicieron famosos en una Europa ya adepta a la porcelana desde el siglo XIV gracias a incorporaciones como la policromía ylos famosos diseños de miniaturas sobre los más diversos temas. Y este éxito iba a continuar y sobrevivir a guerras y cambios de gustos.

Hacia 1900, la Exposición Universal de París catapultaba públicamente la estética modernista, la cual venía gestándose desde la década de 1880 con numerosos exponentes en pequeñas ciudades europeas desde Escocia hasta España, desde la arquitectura hasta lajoyería. En la exposición destacaban las instalaciones expuestas por la casa parisina la Maison de l'Art Nouveau, la londinense Liberty & Co y la neoyorquina Tiffany's. Dos años después, las estéticas modernistas cobran popularidad internacional en la Prima Esposizione Internazionale d'Arte Decorativa Moderna (1902) en Turín, que incluyó a diseñadores de toda Europa.

En este contexto era de esperarque a inicios del siglo XX Meissen buscara renovar su línea, para lo cual contrató a los diseñadores Henry van de Velde y Richard Riemerschmid, importantes exponentes de la estética modernista. El director de la fábrica desde 1903, Erich Hösel, se propuso renovar y reinterpretar los diseños tradicionales de la fábrica, reincorporando en paralelo modelos del siglo XVIII que habían sido olvidados afavor del Neoclasicismo y el estilo de Sèvres.

Problematización y análisis


Cabe hacerse, a partir de la observación de este producto de diseño y su contexto, algunas preguntas:

¿Por qué una fábrica con casi 300 años de tradición en ese entonces necesitaría una renovación a comienzos del siglo XX?
Según consigna Hartzell en “A Ghost in the Machine Age: The Westerwald StonewareIndustry and German Design Reform, 1900-1914”, la región alemana de Westerwald, al otro lado de Alemania en relación a Meissen, se embarcó en una renovación de su producción de loza decorativa de la mano de diseñadores y críticos modernistas. Esto se explica en el marco de una Alemania imperial que buscaba un estilo nacional y contemporáneo que reafirmara su identidad como nación.
Es de esperar que alotro lado de Alemania, Meissen intentara ponerse a tono con este Zeitgeist y convocara a dos renombrados diseñadores externos para renovar su línea de porcelana. Esto se fortalece si reparamos en que tanto Van de Velde como Richard Riemerschmid serán figuras clave de la posterior Deutsche Wekbund.
Sin duda, los nuevos tiempos exigían compatibilizar la rica tradición manufacturera de objetosdecorativos con los nuevos lenguajes que demandaba la sociedad industrial de masas. Las estéticas historicistas estaban en crisis y los modernistas habían logrado con sus investigaciones –desde la ortogonalidad vienesa de Mosser y Hoffman hasta la exuberancia curva de Horta- conquistar a toda Europa, fundamentalmente en el campo de los productos artesanales de alta gama.
Esta compatibilización eratodo un desafío y tuvo resultados contradictorios. Un crítico alemán llamado L. Gmelin dijo a propósito del diseño de vajilla Peitschenhieb para Meissen: “Van de Velde no ha entendido cómo hacer justicia a la delicadeza del material”.

¿Qué tenía Van de Velde que lo hacía un profesional deseable para Meissen al comienzo del siglo XX?
Al decir de Flusser en su Filosofía del diseño (Cap1. Acerca...